pamplona - El Helvetia Anaitasuna tiene esta tarde en casa la oportunidad de seguir avanzando hacia su objetivo más inmediato en esta recta final de la Liga Asobal: acabar entre los ocho primeros. Recibe al Blendio Sinfín (19.00 horas) en La Catedral, un rival al que sólo aventaja en un punto y que dejaría aún más descolgado en esta pugna en caso de conseguir la victoria.

Las últimas jornadas han sido propicias a los intereses del equipo navarro. Venció en casa al Frigoríficos Morrazo y empató en la pista del BM Benidorm, logrando un punto que supo a gloria. El conjunto de Zupo Equísoain es, a día de hoy, uno de los rivales a tener en cuenta de cara a esa octava plaza, al igual que el Valladolid.

No obstante, todas estas miradas de reojo a otros equipos no sirven de nada si el Helvetia no saca adelante sus compromisos. El más inmediato es el de esta tarde ante el Sinfín del exjugador de Anaitasuna Jorge Silva. El lateral zurdo portugués es uno de los valores del equipo cántabro, su máximo artillero con 121 goles. Un auténtico estandarte en el ataque.

Para esta cita, Pere Vaquer y Ander Izquierdo serán baja. El lateral mallorquín acabó lesionado el encuentro ante el Benidorm y el central navarro se está recuperando de un esguince en el tobillo, que se produjo la semana pasada. El resto de jugadores estará a disposición de Iñaki Aniz.

El Blendio Sinfín es un equipo que no está cuajando una buena segunda vuelta. Lleva ocho derrotas consecutivas ante Logroño, Guadalajara, Bidasoa, Benidorm, Cangas, Barça, Valladolid y Cuenca. Su última victoria se remonta a la jornada 19, a finales de febrero, cuando ganó al ya descendido Alcobendas.

aniz: “nos conocemos bien” El entrenador del Helvetia, Iñaki Aniz, advierte no obstante de que el Sinfín planteará “una defensa muy dura” en el partido de hoy. Además, “cuenta con jugadores jóvenes en ataque que mueven bien el balón, que buscan jugar con el pivote”. Para Aniz, el conjunto cántabro “es un buen equipo, bien entrenado” y cree que será “un partido muy duro, muy físico. A ver si somos capaces de jugar al ritmo que nos interesa. Jugar lo más rápido posible, sabiendo que tienen en su defensa su arma base, e intentar contraatacar. Somos dos equipos que nos conocemos bien”, constata.