- Lysa Tchaptchet recuerda perfectamente el día en el que Carlos Viver la llamó para citarla con la selección absoluta. “Estaba estudiando y lloré de la emoción y todo. Con mi madre, porque a la primera persona que llamé fue a ella. No me lo creía”. La joven pivote del Elche Visitelche.com acaba de cumplir 19 años y en paralelo a esta celebración, disputaba su primer gran torneo balonmanístico con la camiseta de las Guerreras: el Europeo de Dinamarca.

Para Tchaptchet, de origen camerunés y que ha crecido desde los 5 años en Villava-Atarrabia, este 2020 también ha sido un año para enmarcar en el plano deportivo. Con su equipo se ha proclamado subcampeona de la Liga Guerreras Iberdrola y, además, también se ha alzado con el subcampeonato de la Copa de la Reina. A todo ello se le suma su convocatoria con la selección absoluta, por lo que dentro del “año tan raro” que ha sido por el coronavirus, lo califica de “increíble tanto a nivel personal como deportivo”.

Cuando sólo contaba con 17 años, Lysa Tchaptchet salió del Beti Onak, su casa desde que era una niña, para fichar por un club de la máxima categoría del balonmano. Reconoce que al principio “fue duro”. “Me costó separarme de mi familia, de mis amigas, de donde soy yo realmente. Aunque mis compañeras del Elche me ayudaron mucho, al igual que el entrenador, y me sentí arropada”, recuerda. Su segundo año en la elite está resultando “muy diferente” al primero, ya que está “totalmente adaptada”, a la vez que muy orgullosa por los pasos que está dando con el equipo ilicitano. El primero, y el más importante, un subcampeonato de Liga que le permite jugar además en Europa.

Ese buen hacer en el Elche, donde desprende calidad desde el pivote, se ha traducido en la llamada de las Guerreras. Con ellas debutó el 27 de noviembre en un preparatorio del Europeo ante Eslovaquia y con ellas ha estado en el torneo continental, donde España finalizó novena. En el primer partido ante Rusia, en la segunda parte, le tocó saltar a pista. “Estaba atacadísima. Dije, ‘ya ha llegado el momento’. Sólo pensaba en darlo todo, en dar lo mejor de mí y en apoyar al equipo en todo lo posible”, rememora. Para ella, estar con jugadoras como Carmen Martín, Silvia Navarro o su paisana Nerea Pena era algo increíble. Y, aunque no pudo asistir al Europeo al final por lesión, se queda sin duda con la experiencia de haber conocido a Shandy Barbosa. “Es mi ídolo desde pequeña y un amor de persona. Tener además una referente negra en la selección ha sido positivo”, resalta.

Tchaptchet reconoce que “nunca” pensó en llegar hasta lo más alto en el balonmano. “Soy una jugadora que siempre ha destacado por su altura, por su envergadura, y siempre me decían que iba a llegar lejos. Pero no me lo acababa de creer nunca. Detrás de todo esto hay mucho sacrificio”, relata. Y, en esta carrera de fondo, se acuerda mucho del club en el que se forjó. “Siempre he tenido el apoyo del Beti Onak. Le tengo mucho cariño. He estado aquí toda mi vida y siempre será mi club. Me ha dado personas importantes para mí y lo llevaré en mi corazón”.

En 2021 vienen “cosas muy bonitas” como un preolímpico, unos Juegos y un Mundial. Lysa Tchaptchet asegura que luchará “por estar ahí”, aunque sea muy difícil. Y, a nivel de club, lo tiene claro. Quiere ver a su Elche “campeón de Liga”.

“Siempre he tenido el apoyo del Beti Onak. Aquí he estado toda mi vida y siempre lo llevaré en mi corazón”

Jugadora del Elche Visitelche.com