Casi 20 días han transcurrido desde que el Helvetia Anaitasuna disputó su último partido liguero. El coronavirus y los compromisos internacionales han interrumpido durante ese intervalo la competición para los navarros, que este miércoles retornan por fin a las pistas para jugar contra el Fertiberia Puerto Sagunto. Un encuentro que tendrá lugar en casa, a las 20.30 horas, y que también se podrá seguir por Navarra TV y por LaLigaSportsTV.

Será un partido para intentar reconducir una racha de cuatro partidos perdidos y regresar a la senda positiva. La jornada anterior debía haberse enfrentado al Cangas a domicilio, pero el duelo quedó aplazado por contagios en el conjunto gallego -se jugará finalmente el 19 de mayo-. Sin obviar la complejidad del encuentro, hubiese sido una buena oportunidad para tratar de enmendar la situación y meter tijera a una dinámica que incluye derrotas ante Ademar León, Granollers, Cuenca y Puente Genil.

En una temporada con demasiados parones competitivos debido a la crisis sanitaria, bien es verdad que este nuevo paréntesis ha servido al Helvetia para avanzar en la recuperación de su enfermería. Dejando al margen a Ander Torriko, lesionado de gravedad para meses, Ibai Meoki y Juan del Arco han mejorado de diversas molestias, al igual que Antonio Bazán, que sigue pese a todo con su puesta a punto tras fracturarse el dedo índice de la mano derecha. Sin Torriko ni Bazán disponibles para este miércoles, dos jugadores de la cantera suplirán su lugar en la convocatoria, a la que regresa Ruslan Dashko.

Pero si Anaitasuna, que se mueve en la zona tranquila de la tabla, tiene el deseo impetuoso de volver a ganar, para el Puerto Sagunto la victoria es una necesidad acuciante. Inmerso en puestos de descenso, 16º con 14 puntos -también con el partido ante el Cangas pendiente-, al equipo valenciano le urge sumar los dos puntos que le acerquen al objetivo de la salvación, en un momento de la Liga donde cada encuentro es una final. No será una empresa fácil para el conjunto de Vicent Nogués, que arrastra cinco derrotas consecutivas -Sinfín, Ademar, Barça, Granollers y Cuenca- y que no gana desde el 17 de marzo. En el Ovni, en la primera vuelta, ya arrebató la victoria al Helvetia (35-30), pero esta vez se juega literalmente la vida y eso le convierte en un rival más peligroso si cabe. Su única baja será la de Bruno Kozina.

DOMÍNGUEZ: "Es un rival que peleará mucho"

A Quique Domínguez no le preocupa en exceso la dinámica negativa que arrastra su equipo. Quiere volver a ganar, por supuesto, pero a la hora de plantear el encuentro ante el Puerto Sagunto, lo tiene claro: "Nosotros no afrontamos este partido de manera diferente a si la racha fuese positiva. Las circunstancias nos han puesto en esta situación. No sé si es del todo justo después de la trayectoria y de todo el trabajo que hay detrás. Pero el equipo está bien y con ganas", asegura.

El técnico del Helvetia Anaitasuna advierte de la peligrosidad de un rival que se está jugando la salvación en este tramo final de Liga. "El partido tiene una dificultad grande. Entramos en una fase del calendario en la que nos tenemos que enfrentar a muchos de los equipos que se están jugando la permanencia, que está cara, apretada y disputada". Puerto Sagunto, añade, es un rival que "viene con muchísima necesidad". "A la buena plantilla que tiene, se le añade esa necesidad de puntos. Va a pelear mucho y tendremos que hacer un buen partido si queremos que los puntos se queden en Pamplona", avisa.

Cree que a su plantilla le ha venido "bien" el parón para recuperar efectivos, con sobrecarga de juego por las ausencias, y confía en la "ambición" y en la "ilusión" de su equipo. "La intención es poder escalar posiciones y dejarlo en la mejor posición posible".