- Llegó el domingo por la noche a casa y tenía el móvil repleto de mensajes. Ander Iriguíbel, delantero del San Juan, fue el autor del doblete que provocó la primera derrota del curso de Osasuna Promesas, después de 20 jornadas invicto. El ariete, que incide una y otra vez en que el principal objetivo es la permanencia, se muestra orgulloso de la temporada de su equipo. El San Juan, debutante en Segunda RFEF, dejó buenas impresiones en Zubieta, sacó un valioso empate de El Sardinero -con gol del 7-, ganó al Racing Rioja en la Agrupación, que llegaba líder, y ahora lo ha hecho con el Promesas.
¿Hasta qué punto entraba en los planes un encuentro como ese?
-Dentro de lo que cabe siempre vamos con esperanzas de ganar, porque no puedes ir a jugar dando un partido por perdido. Por esa parte, siempre hay que ir a ganar. Y después de cómo fue el partido, pues más alegría aun.
¿Cuál cree que fue la clave del partido?
-Nosotros preveíamos un partido de menos goles. Cada vez que tiraban a puerta hacían gol, cada vez que tirábamos nosotros hacíamos gol. Fue un partido loco que sale de vez en cuando. De esos de intercambio de golpes que dicen que a los entrenadores no les gusta. Fuimos 3-2 al descanso, metí el gol y a sufrir. Después del descanso, en esos primeros minutos en los que estábamos dentro del partido, pudo haber sido clave el no conceder gol.
¿Tiene la victoria un valor especial por ser la primera derrota que sufre Osasuna Promesas tras 20 jornadas invicto?
-Nos fuimos contentos porque ganamos. Como si hubiese sido otro partido. Al final tenemos que sumar en cada partido que haya. Cuanto antes sumemos los puntos para el objetivo, mejor. Que luego ganas al Promesas, que lleva una racha espectacular que no había perdido todavía, eso le da un valor añadido. Pero lo que estamos contentos es por sumar para nuestro objetivo.
¿Cómo recuerda los goles?
-Salí sobre el 55 y llevaba diez minutos sin tocar un balón. Me dije 'vaya partido me espera, sólo voy a tener que correr'. Y la primera jugada fue una peinada de Eneko Ezkurra, que queda el balón entre los dos centrales. Meto cuerpo, dudan entre ellos y el portero y meto la puntera. Y el segundo es una contra de Eneko Ezkurra, al que le fija el central, y luego me pasa el balón en el desmarque, me meto para el medio y tiro para el palo corto, que creo que no se lo esperaba.
No es el primer partido loco de la temporada...
-También nos pasó en Tropezón. No somos de tener partidos así, porque somos más de tener partidos de pocos goles y controlarlos más. A veces salen los partidos así, pero las dos veces que nos ha salido así las hemos ganado, así que muy contentos.
De todas formas, el equipo está dando la cara de manera sobresaliente en la temporada del debut
-La primera incógnita que teníamos era ver hasta dónde podíamos competir en esta nueva categoría, hasta dónde podríamos dar nuestro nivel. Con la segunda vuelta empezada, estamos demostrando que estamos en el nivel de la categoría, pero sabemos que para estar en ese nivel tenemos que correr mucho. Igual que hemos ganado a Osasuna, nos ganó el Cayón, que iba último. Si no estás bien, pasa eso.
A pesar de que les costó un poco el comienzo...
-A principio nos pilló lo bien preparados que están los equipos, y lo intensos que salen en los partidos. A principio, a ser una categoría nueva nos pilló de sorpresa, pero ya sabemos cómo es la categoría y no nos pilla por sorpresa.
¿Ha habido un partido que les haya servido de inflexión para saber que tienen nivel para competir?
-No sabría decirte uno en concreto. Empezamos ganando y empatando los dos primeros partidos y luego tuvimos una mala racha en la que sacamos dos puntos en siete partidos. Jugamos bien, pero no nos llegaban los resultados. Luego ganamos al Tropezón y a partir de ahí de ese partido sí que empezamos a sumar más puntos. No fue ese el partido en el que nos diéramos cuenta de que estábamos bien, pero a partir de ahí fuimos sumando más puntos y fuimos cogiendo más confianza.
El que vea la tabla pensará que están teniendo una temporada tranquila
-Tranquila, por fuera parece, pero por dentro no, porque sabemos lo que nos cuesta y lo mucho que tenemos que correr para que desde fuera parezca que estamos teniendo una temporada tranquila, pero dentro sabemos que o corremos y damos todo todos los días o no nos va a dar. Estamos a tope, dándolo todo, y habrá partidos en los que ganemos y perdamos, pero mientras los compitamos el equipo no se echa nada en cara y disfruta. Si nos da para salvarnos, mejor.
¿Han comentado en el vestuario la opción de pelear por algo más que la permanencia?
-Alguna broma, pero nada serio. Tenemos muy claro que el objetivo y lo primero es salvarnos, que es nuestro primer año, y luego, si nos quedan jornadas de antelación, pelearemos por quedar lo más arriba posible. Pero el objetivo claro es la salvación.
En esta segunda vuelta imagino que os ayudará el haberos enfrentado a los rivales para conocerlos mejor
-Sí, claro. Al principio son todos los equipos nuevos, no conoces a casi nadie, y ahora en cambio tienes partidos para verles. Ya sabemos por dónde van los equipos, por dónde les podemos pillar. Creo que por esa parte va a haber menos sorpresas. Esos partidos nos costaron mucho, pero vuelvo a repetir que estuvimos bien, pero los resultados no se dieron y en esta segunda vuelta esperemos que eso no nos pase.
¿Cómo valora en ese caso el próximo reto, ante el Gernika?
-Nosotros haremos nuestro partido en casa, como lo hacemos siempre. Ellos son diferentes a lo que son el Sestao o el Arenas, que son muy físicos y directos. El Gernika expone más con el balón e intenta jugar más y habrá más espacios y más momentos para jugar. Tendremos que estar muy juntos y esperar nuestra oportunidad para hacer lo que sabemos hacer.
"Ahora sabemos por dónde van los equipos y por dónde les podemos pillar. Creo que por esa parte van a haber menos sorpresas"
"En esos primeros minutos después del descanso, en los que estábamos dentro del partido, pudo ser clave el no conceder gol"
