pamplona - LAB eligió por primera vez Pamplona para celebrar su acto central del Día del Trabajo. Miles de personas provenientes de la CAV y de Navarra se citaron en la Plaza del Castillo para cubrir una manifestación, encabezada por el lema Kapital hautsi, bizitzari eutsi. Euskal Herria decide. Este año, a diferencia de otras ediciones, no usaron el kiosco de la plaza del Castillo para pronunciar el discurso sino que instalaron el escenario en el mismo sitio que las protestas feministas del 8-M o las manifestaciones por los jóvenes de Altsasu. Desde ese lugar, la secretaria general de LAB, Garbiñe Aranburu, apostó “por alianzas entre personas de izquierdas y soberanistas, entre quienes luchan por el cambio social y quienes defienden el cambio político”.

Aranburu insistió en que LAB, que aplica “un sindicalismo de contrapoder abertzale”, defiende “tejer alianzas y unir luchas para impulsar el freno a la precarización” confrontando con la patronal. Para ello, proclamó la necesidad de activar “huelgas en los centros de trabajo y posibilitar a la clase trabajadora marcos de respuesta generales”. Aranburu remarcó que “plantear movilizaciones más generales ayudará a las luchas sindicales” desarrolladas en empresas y al resto de movimientos en otras áreas de la sociedad. Como ejemplo, informó de que en Baiona, LAB, CGT, Bizi, grupos feministas y juveniles estaban en la manifestación.

Aranburu dejó claro que LAB ha decidido “romper con el capital y apostar por la vida” y para ella son necesarias “las luchas laborales y sectoriales”. En este objetivo debe alinearse el sindicato con el movimiento feminista “que ha puesto el propio sistema en cuestión”, con los pensionistas “que han condicionado la agenda política”, y con los migrantes porque “nosotros lo fuimos” y ahora “Euskal Herria es un pueblo de acogida”. Todos estos colectivos defienden “otro modelo económico y social” y con ellos hay que atajar “los males del mercado laboral que pasan por una terrible precariedad, inestabilidad, salarios bajos y pérdida de salud”. Y estos grupos estaban allí para escucharle: las mujeres que con su pancarta denunciaban “la brecha salarial”, los trabajadores migrantes de Huerta de Peralta o los pensionistas con su reivindicación de 1.080 euros como mínimo...

comicios generales y autonómicos En su mitin, los resultados de las elecciones generales también merecieron una valoración de Aranburu: “El trifachito se ha quedado sin representación en la CAV y la alianza de la derecha en Navarra no ha traído un incremento de votos sino un descenso”. Además, la proximidad de las elecciones autonómicas también estuvo presente en el discurso de la secretaria general de LAB, ya que reiteró que “en Nafarroa, mantener el régimen fuera de las instituciones es una condición imprescindible para el cambio social”. Aunque resaltó que no es “suficiente”, ya que “todavía es muy visible la larga mano de la patronal en las políticas de Geroa Bai”. Aranburu abogó por “dejar al régimen fuera de las instituciones y por impulsar la izquierda soberanista”. De esta forma manifestó que “el sindicalismo abertzale no puede relativizar la importancia de la lucha nacional, ya que LAB quiere decidir aquí”. Ante sus militantes subrayó la “autonomía de esta central”, y repitió el mensaje: “Queremos decidir todo aquí para avanzar en la construcción de una república socialista, feminista y euskaldún”.

Reivindicaciones. Plasmadas en el amarillo tradicional de las pancartas de LAB se podían leer diferentes lemas: Euskal Herria contra la precariedad; La brecha salarial es un problema político; Vida digna para todos; y Aquí decidimos nuestras pensiones.

Paella para todos. El sindicato instaló una carpa en la calle Redín de Pamplona e invitó a los asistentes a una paella. Habían calculado repartir más de mil raciones.

Al final. El militante de LAB Jon Kirru Iparragirre entonó la Internazionala y el Eusko Gudariak.