pamplona - El incremento del precio del barril de petróleo por el ataque con drones a refinerías de Arabia Saudí el pasado fin de semana ha repercutido rápidamente en el coste de repostar combustible en las gasolineras. El valor del carburante -tanto gasolina como gasóleo- ha aumentado entre un 2% y un 4% en apenas dos días por la volatilidad del mercado, confirmaron ayer fuentes del sector en Navarra. “El lunes siempre es una jornada de mucho trabajo por el tránsito de camiones, pero el pasado 16 de septiembre se observó un aumento de turismos respecto a los que acuden habitualmente a principios de semana por el temor del incremento del precio de la gasolina y del gasóleo, que es lo que ha ocurrido finalmente”, manifestaban desde una estación de servicio, ubicada en la Cuenca de Pamplona. Su responsable remarcaba que en apenas dos días “tanto el precio del litro de gasolina como el de gasóleo había crecido cuatro céntimos”. Así por ejemplo, llenar el depósito de 50 litros de un vehículo, tanto gasolina como gasóleo, se ha encarecido en estas 48 horas dos euros.

La Asociación de Operadores Petrolíferos (AOP), Repsol, Cepsa, BP, Galp y Saras, indica en su página web que cuando un usuario paga el depósito del combustible la materia prima representa un 36% de esa factura.

El sector del transporte en la Comunidad Foral expresó ayer su preocupación ante el conflicto internacional que se ha generado en Arabia Saudí y las posibles repercusiones en su actividad.

El presidente de la Asociación Navarra de Empresarios de Transporte por Carretera y Logística (Anet), Miguel Suárez, manifestó que si se produce una escalada del precio de los carburantes y se mantiene en el tiempo, deberán revisar sus tarifas. “Una subida del 10% del gasóleo puede suponer un aumento de nuestros honorarios de entre un 3,5% y un 4%”, calculó Miguel Suárez, que representa a 300 socios, con una flota de más de 2.000 vehículos pesados.

un depósito de hasta 1.300 litros Según los datos que manejaba el presidente de Anet, “el gasóleo había sufrido un incremento del 8,7% en los últimos días, con la consiguiente repercusión en el coste del combustible”. Come ejemplo, señaló que un camión con ruta internacional de larga distancia dispone de un depósito de entre 1.200 y 1.300 litros, por lo que si el litro de gasóleo había crecido casi un 9%, llenarlo estos días se había encarecido unos 120 euros. “Nuestros transportistas deben repostar entre cinco y seis veces al mes”, reiteró Miguel Suárez.

Toni Monzó, el gerente de la Asociación de Transportistas Autónomos de Navarra (Tradisna), recordó que el gasóleo engloba un 30% de los costes que soportan estos profesionales. “El incremento del valor del carburante ha oscilado entre el 2% y 4%”, indicaba Monzó, que representa a una asociación con 815 miembros y unos 2.000 vehículos.

Tanto el gerente de Tradisna como el presidente de Anet coincidieron en resaltar la “volatilidad extraordinaria del mercado del petróleo durante estas jornadas”. Ambos mostraron sus pretensiones de que este conflicto se solucione lo antes posible. De esta forma, el precio del crudo retrocedió ayer, tras haberse disparado un 15% el lunes, una vez que Arabia Saudí anunció que había recuperado más de la mitad de la producción afectada por los dos ataques con drones y disminuyó el temor a un desabastecimiento en el mercado.

subida del 15% y bajada del 6,33% El barril de Brent, de referencia en Europa, concluyó la sesión en el mercado de futuros de Londres en 64,65 dólares, un 6,33% por debajo del cierre del lunes, mientras que el estadounidenses Texas (WTI) retrocedió un 5,7%, hasta los 59,34 dólares, informó Efe.

Las ofensivas reivindicadas el pasado sábado por rebeldes hutíes del Yemen recortaron unos 5,7 millones de barriles diarios de la producción de la petrolera estatal saudí Aramco, lo que representa la mitad del bombeo del país y en torno al 5% de la producción mundial.

La perspectiva de que la industria saudí recuperará la normalidad antes de lo previsto contribuyó a corregir el brusco incremento que sufrió la cotización del crudo el lunes, cuando se contabilizó el mayor pico al alza desde la guerra del Golfo de 1990.