PAMPLONA. Decenas de jubilados se han manifestado este jueves en la Plaza de Merindades de Pamplona, convocados por la asociación de jubilados de Navarra Sasoia, para pedir unas pensiones dignas y hacer una llamada a los "agentes sociales" para que participen en la huelga general prevista para el 30 de enero.
Los pensionistas han alzado sus voces gritando consignas como: "gobierne quién gobierne, las pensiones se defienden", "pensiones privadas, personas estafadas" o "terrorismo es no llegar a fin de mes" mientras sostenían pancartas en las que se podían leer frases como "impuestos justos, solidarios y progresivos".
El portavoz de Sasoia, Patxi Urrutia, ha denunciado en declaraciones a Efe la intención de los anteriores gobiernos de recortar las pensiones y "ofertarlas a través de seguros privados", puesto que ha asegurado que muchos pensionistas viven "por debajo del umbral de la pobreza", a quienes desde Sasoia quieren ayudar a que tengan una "vida digna".
Para ello, según sus cálculos, serían necesarios 1.080 euros mensuales para "poderse calentar en invierno y poder alimentarse bien durante todo el año", algo que han manifestado este miércoles y pretenden repetir en la huelga del día 30, una cita que ha considerado "indispensable" para que la gente salga a la calle.
Una de las pensionistas que ha participado en la protesta, Blanca Unzue, ha comentado que, tras 36 años cotizados, "no es normal" que tenga que controlar sus gastos "muchísimo más que cuando era joven" y que pedir esos 1.080 euros "no es una locura" y es "totalmente viable".
