Antonio Martín, exjugador de baloncesto y presidente de ACB, probó ayer el sistema de reconocimiento facial de Das Nano, empresa navarra puntera en una tecnología llamada a imponerse en múltiples sectores. Con sus dos metros y nueve centímetros de altura, Martín comprobó la eficacia de un dispositivo que servirá para controlar con total seguridad los accesos a diferentes recintos, desde pabellones deportivos a estaciones de tren o aeropuertos. "Acaba de validar el dispositivo para quienes superan los dos metros de altura", bromeaba Esteban Morrás, fundador de una compañía navarra en pleno crecimiento, que cuenta ya con cerca de un centenar de trabajadores de alta cualificación y que está "repatriando talento", tal y como explicaba ayer su director general, Eduardo Azanza.

Decenas de personas pudieron probar ayer el dispositivo, que controla los accesos a la empresa, pero que se estrenaba en un evento público. El Navarra Arena acogió ayer la OTD Challenge 2020, organizada por el Colegio de Ingenieros Industriales de Navarra y la Fundación Industrial de Navarra, que reunió a 47 compañías, que mostraron los últimos avances en tecnología. Asistieron 420 personas, de las que cerca de la mitad se prestaron a probar el sistema de reconocimiento de Das Nano, cuya fabricación en serie se realiza en empresas de electrónica de Peralta. La compañía trabaja para iniciar la producción a mayor escala, una vez que vaya firmando los contratos de suministro con los diferentes clientes con los que ha contactado. Desde instituciones a empresas públicas (como Adif, en la estación de AVE de Málaga) y privadas. De hecho, Das Nano ha creado junto a BBVA su propia compañía (Veridas), que permite la verificación de la identidad para abrir una cuenta bancaria, por ejemplo.

Transformación

Digitalizarse no es una opción

La presentación de Azanza sirvió para abrir una serie de intervenciones que tenían como objetivo presentar soluciones tecnológicas desarrolladas en Navarra. Una iniciativa que era valorada ayer por el director de la a Oficina de Transformación Digital de Navarra (OTD), Gonzalo Franco, quien hizo balance del trabajo llevado a cabo por la entidad el pasado año y de las iniciativas programadas para este 2020. En concreto, la OTD, gestionada por el Colegio de Ingenieros Industriales de Navarra y la Fundación Industrial Navarra, superó en 2019 los 132 eventos programados en un primer momento para realizar un total de 146 en los que tomaron parte un total de 3.202 profesionales y 553 empresas.

La Oficina de Transformación Digital de Navarra, gestionada en nuestra comunidad por el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Navarra, forma parte de una iniciativa puesta en marcha en toda España por el Ministerio de Economía y Empresa, a través de su entidad pública Red.es, que tiene entre sus objetivos mejorar el uso, la calidad y el acceso a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y cuyo presupuesto global es de cinco millones de euros financiados por el Programa Operativo Plurirregional de España (POPE) y los Fondos de Desarrollo Regional (Feder).

"La digitalización de la empresa navarra no es una opción, es una obligación", explicó Miguel Iriberri, decano del Colegio de Ingenieros Industriales de Navarra, quien aseguró que tanto esta institución como la Fundación Industrial de Navarra van a seguir trabajando de manera conjunta. "Caminando solo se llega más rápido, pero juntos llegaremos más lejos", explicó Iriberri.

Entre las empresas que expusieron sus desarrollos tecnológicos se encontraba Imeanticipa, que ha desarrollado una aplicación que permite a las empresas multinacionales tomar las mejores decisiones de inversión y de negocio internacional. Miguel Ángel Casquero fue el encargado de mostrar una herramienta con la que ya trabaja, por ejemplo, Urbaser, y que aporta toda la información necesaria sobre el país y el sector escogido, desde los números macro hasta los calendarios de licitaciones o la evolución de la competencia.

Carlos Liberal, de Biko, mostró la interfaz desarrollada para la Asociación Española contra el Cancer. "Los formularios son fríos y de los que se trata precisamente es de reducir el estrés que sufre quien padece la enfermedad", explicó. Con esta premisa, la empresa navarra ha desarrollado la tecnología necesaria que permite a los usuarios escribir aquello que deseen antes de ser redirigidos al departamento correspondiente.

Convertir en inteligentes a las máquinas, mediante el empleo de inteligencia artificial o simplemente conectándolas a la red es un objetivo de muchas empresas y, al mismo tiempo, la oportunidad para otras. Lo contaba Mikel Meoki, de Embeblue, cuya empresa ha trabajado para Orklis, de grupo Mondragon. "Ellos vendían un producto y perdían su rastro. Ahora son capaces de mejorar el mantenimiento, de rebajar los costes, de mejorar las siguientes versiones que desarrollen a partir de la información de la que disponen y de ofrecer nuevos servicios", dijo.