La inflación regresa tras años ausente. El rebote económico ha tensionado las cadenas de suministro, encarecido las materias primas y los productos finales. Y el auge en los precios ha comenzado a trasladarse también a los salarios, aunque de firma algo más contenida. Hasta junio, último mes con datos cerrados, los convenios colectivos firmados en lo que va de año registraban una subida media del 1,9%.

El incremento no es sin embargo suficiente para compensar, al menos de forma momentánea, el crecimiento de unos precios que podrían haber tocado techo en julio, cuando en toda España registraron un incremento del 2,9% interanual. De hecho, en Navarra ya alcanzaron prácticamente esta cifra en junio, si bien la mayor parte de los analistas prevé que el alza de los precios se modere en la segunda mitad del año. Con ello y el incremento salarial que se pacte este año en los convenios, la pérdida de poder adquisitivo se mitigaría de manera sensible.

El alza en los salarios pactados es ya una realidad según los datos que maneja el Ministerio de Empleo. No solo en los convenios que se han firmado en los seis primeros meses del año, una minoría de todos los existentes, sino en el conjunto de las condiciones laborales pactadas. Así, los sueldos regulados en convenios actualmente en aplicación recogen ya una subida media del 1,47% en Navarra, que se queda algo por debajo de la media (1,56%) pero que recoge ya el impacto de los nuevos acuerdos que se firman.

Los sindicatos, asimismo, tienen claro que esta vez, a diferencia de la crisis de 2008-2013, la solución no pasa por la austeridad ni por congelaciones salariales generalizadas. Y tras el impacto inicial, entienden que en muchos sectores la crisis ha quedado acotada a un periodo de tiempo determinado y que es resulta imprescindible "generalizar las cláusulas de salvaguarda salarial para proteger el poder adquisitivo de los salarios".

La pandemia, eso sí, ha añadido algo más de desregulación laboral, al haberse frenado la negociación y la firma de nuevos acuerdos laborales. Ahora mismo "la cifra de personas cubiertas por convenio es 1,8 millones inferior a la de hace un año", explican desde CCOO. En Navarra, la cifra de trabajadores protegidos cae en los últimos meses, desde los 88.000 de octubre a los 67.000 actuales. "Es preocupante -añaden desde CCOO- que el 17% de las y los trabajadores con convenio para 2021 tenga congelado su salario, reflejo de la complicada situación durante la pandemia".

La protección de las rentas conseguida mediante los ERTE -una iniciativa novedosa que ha salvado el empleo en los meses más complicados- traslada ahora su foco hacia las rentas más bajas, dependientes de la evolución del Salario Mínimo Interprofesional. Congelado inicialmente, la evolución de los precios y del empleo -con mejores datos de los previstos a finales de la primavera y comienzos del verano- parece haber girado la posición del Gobierno de España, abierto ahora a aplicar un incremento en el último trimestre del año.

"El Gobierno está comprometido con la mejora de las condiciones laborales y la subida del SMI", explicaba a finales de la semana pasada la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño. "En tres años lo hemos subido un 30% y en la legislatura el objetivo es alcanzar el 60% del salario medio. Esta senda se ha visto lamentablemente truncada por la pandemia. Mi deseo es que cuanto antes podamos retomarla, pero sin poner en riesgo el crecimiento económico y la creación de empleo. Tenemos que seguir tomando las decisiones correctas en el momento adecuado", señaló la ministra.

Aunque la subida salarial pactada este año en Navarra es inferior a la media, los datos de los últimos ejercicios muestran un mejor comportamiento de los sueldos que la media. Especialmente a partir de 2015, cuando comenzó a percibirse una cierta recuperación. En aquel momento, el sueldo medio en Navarra se situaba en unos 23.600 euros, en torno a 3.000 euros menos que en la CAV y casi 4.000 euros menos que en Madrid. Desde entonces y por diferentes factores -desde el peso de la industria al del sector público, pasando incluso por las políticas de impulso a la contratación estable- la diferencia se ha reducido de forma sensible. Y más aún si se computan los datos de 2020. En este periodo, el sueldo medio ha crecido en Navarra por encima de la media nacional y la diferencia con las comunidades con salarios más altos se ha reducido a la mitad. En 2020 el salario medio quedó en 25.411 euros