Segundo récord histórico consecutivo en el precio de la electricidad en el mercado mayorista. El coste medio del megavatio/hora alcanzará mañana los 111,88 euros, cifra que supone un nuevo máximo y supera en un 4,8% al anterior récord de hoy, de 106,74 euros.

Si se compara con el precio que se pagó el segundo martes de agosto de hace un año, 38,88 euros/MWh, el precio mayorista de la electricidad prácticamente se triplica. Por franjas horarias, el precio oscilará entre los 120 euros/MWh que costará de 21.00 a 23.00 horas y los 102,22 euros que valdrá entre las 17.00 y las 18.00 horas.

Los 111,88 euros de este martes superarán todos los niveles de julio e incluso los picos de arranque de este agosto, que ha marcado ya cinco máximos históricos -el último hoy mismo, con 106,74 euros-. El precio de la luz proseguirá así en este arranque de mes con la tensión vivida a lo largo de todo julio, que llevó a cerrar con una media de 92,42 euros/MWh, lo que supone el nivel más alto de la historia y un 166% por encima del mismo mes del año pasado.

El encarecimiento en el precio del mercado eléctrico está motivado por los altos precios de los derechos de emisión y el encarecimiento del gas natural. En concreto, los derechos de emisión se han encarecido hasta superar en este arranque de agosto los 54 euros por tonelada, cuando a principios de año cotizaban en torno a los 33 euros. Mientras, el precio del gas natural repunta ya hasta los 41,7 euros por MW/h.

Además, coincidirá con el inicio de una ola de calor, que será la más intensa, extensa y duradera de lo que llevamos de verano con temperaturas de hasta 45 grados en puntos del sur peninsular, y que anticipa precios extraordinariamente altos durante los próximos días.

Ante la escalada de precios, la organización de consumidores FACUA-Consumidores en Acción ha exigido hoy al Gobierno de Pedro Sánchez que emprenda nuevas medidas para poner freno a la "especulación" en la fijación de las tarifas eléctricas.

La asociación plantea un decálogo de reivindicaciones, entre ellas un cambio en las reglas de la subasta del mercado mayorista, la bajada del IVA de forma permanente, el control de ofertas fraudulentas de las eléctricas y la aprobación de un nuevo modelo de bono social que represente al menos un 50% de descuento en la factura y del que se puedan beneficiar las familias que cobren no más de 2 salarios mínimos, que aumentarían hasta 3 en función del número y características de los miembros.

Tambíen solicita cambios en las reglas de la subasta del mercado mayorista o recuperar para el Estado las concesiones de centrales hidroeléctricas que caduquen, con el fin de integrarlas en una empresa pública de Energía.

"De esta manera, se podrían fijar precios justos que contribuyan a reducir la factura de la luz", explican desde Facua, que ha lanzado este comunicado alertada por los precios récord de la energía registrados estos últimos 20 días. En concreto, en lo que va de agosto, el precio de la luz ha registrado ya cinco nuevos récords, incluido el de hoy. Hoy ha sido su segundo mayor registro, de 106,74 euros.

El martes pasado, el tercero, con 106,27 euros; el cuarto precio más alto de la historia se dio el miércoles, con 105,24 euros; y el quinto, con 103,07 euros, el pasado lunes.

Peso en la factura

El precio de la energía tiene un peso cercano en la factura de en torno al 24%, mientras que alrededor del 50-55% corresponde a los peajes -el coste de las redes de transporte y distribución- y cargos -los costes asociados al fomento de las renovables, a las extrapeninsulares y las anualidades del déficit de tarifa- y el resto, a impuestos.

Las oscilaciones en el precio diario afectan a los consumidores acogidos a la tarifa regulada (PVPC), algo más de 10 millones, mientras que están exentos los que están en el mercado libre -unos 17 millones-, ya que cuentan con un precio pactado con su compañía.

En un intento por reducir la factura de la luz, el Gobierno español aprobó un Real Decreto-Ley por urgencia para bajar el IVA de la luz del 21 al 10% hasta finales de este año y la la suspensión del impuesto del 7% a la generación eléctrica durante tres meses. Sin embargo, ante la escalada diaria de los precios de la luz, está resultando claramente insuficiente.