madrid. La UEFA abrió ayer un expediente disciplinario al Manchester United por la tarjeta roja mostrada a Nani y por no cumplir con sus obligaciones con los medios de comunicación después del encuentro ante el Real Madrid. Nani, expulsado en el minuto 56, pasó tras el encuentro por la zona mixta de Old Trafford sin querer hacer declaraciones, igual que sus compañeros.

"No tenemos permitido decir nada", señaló Nani, según informó ayer la cadena británica BBC, mientras la mayoría de los jugadores a las órdenes de Alex Ferguson pasaban ante los periodistas sin hacer comentarios sobre la derrota ante el Real Madrid (1-2) que les dejó fuera de la Liga de Campeones.

Tampoco Ferguson compareció en la habitual rueda de prensa que los entrenadores ofrecen al término del partido y fue sustituido por su ayudante Michael Phelan, que comentó a los periodistas que el veterano técnico no estaba "en condiciones" de hablar con ellos.

la prensa inglesa, indignada Por su parte, la prensa británica clamó ayer contra la expulsión que "destrozó" al club inglés y favoreció su eliminación, según el tabloide The Sun. "La intención es discutible", afirmaba The Guardian, que al igual que otros diarios británicos se basó en este argumento para deslegitimar la actuación del colegiado, Cüneyt Çakir. Según The Times, "no había malicia y los ojos de Nani estaban claramente en el balón".

En otro orden de cosas, Cristiano Ronaldo se congratuló por el pase del Real Madrid, pero reconoció que estaba "triste", porque sus antiguos compañeros merecían "un poco más". El portugués confesó que fue la primera vez que se había visto superado por las emociones en un partido.