El Villarreal, ante el favoritismo del Bayern

Villarreal Rulli; Foyth, Albiol, Pau Torres, Estupiñán; Trigueros, Capoue, Parejo, Lo Celso; Yéremy Pino, Danjuma y Gerard Moreno.

Bayern Neuer; Pavard, Süle, Lucas Hernández, Davies; Kimmich, Goretzka; Sané, Müller, Coman; y Lewandowski.

ÁrbitroAnthony Taylor (ING).

Hora/tv21.00/Movistar Liga de Campeones 1

- El Villarreal afronta hoy en el Estadio de la Cerámica el primer asalto de su dura eliminatoria ante el Bayern Múnich, un partido de ida en el que los castellonenses se esconden tras el favoritismo alemán para tratar de sorprender como ante la Juventus.

Nadie apostaba por el Submarino Amarillo cuando el pasado mes de diciembre el sorteo le enfrentaba con la Vecchia Signora en octavos. Ahora, el campeón de la Liga Europa afronta sus primeros cuartos de final de la máxima competición continental en -tras los de las temporadas 2005-06 y 2008-09- ante uno de los grandes favoritos.

Para ganar, deberá mejorar la imagen ofrecida en sus dos últimos duelos de La Liga, que le ha alejado de su objetivo de acercarse a posiciones continentales, ahora a seis puntos. Sin embargo, el equipo se agarra a la ilusión y a la competitividad que garantiza el hecho de que bajo el mando de Emery todavía no ha perdido una eliminatoria europea, después de ganar el pasado año el segundo torneo continental y superar a la Juventus.

El cuadro castellonense acude a la cita con la ausencia por lesión de Alberto Moreno y la duda del tocado Boulaye Dia, pero recuperará a un Samu Chukwueze que deberá esperar previsiblemente su oportunidad en el banquillo ante la titularidad del tridente Yeremy Pino, Arnaut Danjuma y Gerard Moreno.

Enfrente, el Bayern, seis veces campeón de Europa, no tira la vitola de favorito y espera llevarse a Múnich un resultado favorable que le evite sustos como el vivido en octavos ante el Salzburgo, donde un gol en el minuto 90 de Kingsley Coman evitó males mayores la ida (1-1).

El 7-1 de la vuelta despejó cualquier duda y les volvió a situar como uno de los rivales a batir. Además, en la Bundesliga está a un paso de conseguir su décimo título consecutivo, a pesar de la polémica en su última victoria ante el Friburgo (1-4), donde jugó durante 20 segundos con 12 jugadores y que previsiblemente le hará perder los tres puntos.