El Subiza araña un punto en Gernika

Con las novedades en el once de Mikel Ansó, Pablo y Mariano, el Subiza a punto estuvo de adelantarse en el marcador poco antes de cumplirse el primer minuto de juego. El propio Pablo, en una buena arrancada por la derecha, se plantó ante el guardameta vasco pero su disparo cruzado salió cerca del poste. Bajo la lluvia en Gernika, los de César Monasterio contaban con mucha posesión de balón ante un rival que esperaba su oportunidad al contragolpe.

Las sensaciones eran positivas para un Subiza que perdía rápidamente al ariete Mariano por lesión. Poco después, el equipo navarro perdía la concentración en un saque de banda que, tras peinada en el primer palo, llegó a la posición de Arzalluz, incomprensiblemente solo y sin marca, para poner el uno a cero. Un minuto después, Rafa Fernández se tuvo que emplear a fondo ante Nates para evitar un segundo mazazo vizcaíno.

Los navarros no se arrugaron pero volvieron a perdonar mediada la primera mitad cuando Pablo, tras una buena triangulación con Amadoz, fue incapaz de superar a Gorka San Nicolás en el mano a mano. Con el paso del tiempo, el encuentro se fue diluyendo en la medular, sin aproximaciones claras a las áreas para consumarse la ventaja mínima del cuadro local del Gernika al descanso.

La segunda mitad comenzó con un considerable susto para el Subiza cuando Baqué en área pequeña envió por poco por encima del larguero un gran servicio del lateral Larrauri. Los de César Monasterio no se dejaron avasallar pero se mantenían imprecisos en su juego, sobre todo cuando alcanzaban la línea de tres cuartos, donde carecían de ideas claras para generar peligro.

Un chut de Asirón cerca de la media luna, con buena estirada del portero local, era lo único destacable antes de que una poderosa arrancada por la zona central de Asirón acabó con su derribo claro dentro del área. Bruno transformó el máximo castigo para anotar su segundo gol del curso y devolver el empate a la contienda.

Con un par de córners sin premio en el acoso final de los vascos concluía un partido marcado también por la fuerte lluvia sobre el campo de Urbieta.