La selección navarra se despide este viernes por la tarde del Campeonato de España de fútbol playa sub-17 con un tercer partido en el que se juega la quinta y sexta plaza con Andalucía, una de las selecciones más importantes en esta modalidad y que, como las forales, se quedaba a las puertas de las semifinales tras ganar contundentemente su primer partido a Cataluña (1-13) a y perder por la mínima en el segundo ante Extremadura (3-2).
El combinado de Álvaro Cordón se quedó a las puertas de clasificarse entre las cuatro mejores del país en la primera participación de su historia. Navarra sucumbió ante la potente Región de Murcia, una de las principales candidatas al título nacional. El duelo finalizó 1-7. Un castigo excesivo a tenor de lo visto sobre el ‘Cádiz Arena’ de Playa Victoria.
El primer periodo fue el más igualado. Cuando ambos equipos estaban finalizando el mismo, uno de los árbitros señaló una controvertida mano de Ángela Mayoral. Esto provocó que Murcia, por medio de Carla, se adelantara en el marcador a falta de 40 segundos e impidió que Navarra finalizara la primera parte con un meritorio empate sin goles.
Aun así, las forales no le dieron la espalda al encuentro y reanudaron el choque con el objetivo de plantar cara. Y eso que a los dos minutos, Murcia volvía a golpear con Carla volviendo a marcar. En el saque de centro posterior, Adriana Arriazu mandó el balón al larguero. Poco después, Nahia Cenoz obligó a la portera a esforzarse con una buena parada. La mala suerte se cebó con Navarra pues un despeje, en campo propio, de la murciana Buji acabó botando mal en su llegada a la portería de Leyre Pérez de Albéniz y colándose en el interior de la misma. A pesar del 0-3, el combinado de Álvaro Cordón insistió en busca de recortar la desventaja. Algo que consiguió Nahia Cenoz con un disparo aprovechando un balón dividido. Navarra se lo creyó y acarició el segundo por medio de Ángela Mayoral; quien dispuso de un mano a mano con la meta rival. Ésta desvió el chut con la cara, desbaratando una clara ocasión foral. La guardameta murciana anduvo, de nuevo, providencial en una falta en cono ejecutada por la portera navarra, Leyre Pérez de Albéniz. Su homóloga en Murcia tocó lo justo para enviar el esférico al larguero y, de ahí, a córner.
De esta forma, el marcador indicaba un inquietante 1-3 a falta del tercer y último periodo. Parte que se reanudó con otra desafortunada acción en contra de los intereses navarros. Un centro lateral da un mal bote cuando la portera, Aizane Ibarrola, se disponía a recogerlo y acaba en los pies de una jugadora murciana que sólo tuvo que empujar el balón a gol. Otros tres tantos en los últimos cinco minutos sellaron una goleada excesiva que no resta mérito al trabajo realizado por Navarra. Un combinado que acudía a este Campeonato de España con apenas media docena de entrenamientos en su primer contacto con esta modalidad.