rusia - Miles de personas marcharon ayer por el centro de Moscú para honrar la memoria del líder opositor Borís Nemtsov, tiroteado hace dos años frente al Kremlin, y condenar la política del presidente ruso, Vladímir Putin, al que acusan indirectamente del crimen.
Al frente de la protesta se situaron los líderes del partido Parnas 0al que pertenecía Nemtsov, entre ellos el ex primer ministro, Mijail Kasiánov, y otros destacados dirigentes de la oposición extraparlamentaria rusa.
Poco antes de que empezará la manifestación, un hombre no identificado vertió un colorante verde en la cara de Kasiánov, que tras salir un momento de la columna, continuó la marcha con la cara manchada.
“La política de Putin está basada en la mentira total”, “Venceremos pese a todo”, “Héroe de Rusia”, “Libertad para los presos políticos ucranianos” o “La televisión rusa es un arma de terror informativo” son algunos de los eslóganes que se pudieron ver en las pancartas que portan los manifestantes.
Cuando concluyó la marcha, los ciudadanos que lo desearon pudieron ir sin trabas de la policía al puente donde fue asesinado Nemtsov, a muy pocos metros del Kremlin, para depositar flores en el lugar de la tragedia.
El pasado 3 de octubre el Tribunal Militar de Moscú abrió el juicio contra los cinco chechenes acusados de tirotear a Nemtsov, el asesinato político más sonado desde que Vladímir Putin llegara al poder en 1999.
Familiares y correligionarios de Nemtsov consideran que será imposible hacer justicia mientras en el banquillo de los acusados no se sienten los organizadores y, lo más importante, aquellos que encargaron el crimen.
La oposición extraparlamentaria rusa acusa abiertamente a Putin de crear el clima de odio que motivó el asesinato de Nemtsov, crítico con su gobierno.
Se cree que elautor de la muerte fue Zaúr Dadáev, que en ese momento era miembro de las fuerzas especiales de Chechenia, motivo por el que el juicio transcurre en un tribunal castrense. - Efe