tudela. El Ayuntamiento de Tudela ha encargado al químico Aitor Aguinaga la elaboración de un estudio sobre la posible infestación de termitas en el Casco Viejo, un trabajo que tendrá un coste de 5.310 euros. La contratación del Consistorio surge ante las quejas que en el mes de mayo presentaron diversos vecinos de las calles Dombriz y Portal, que vieron como, incluso, algunos de los techos de sus habitaciones se habían venido abajo por una plaga que venían sufriendo desde hacía varios años.
Según informó ayer el Consistorio, la intención es buscar "una solución que sea eficaz, viable económicamente y que represente la mínima agresión para el entorno y el medio ambiente". El plan de acción comenzará dividiendo el Casco Viejo en diversos sectores y éstos, a su vez, en manzanas que constituirán las unidades de actuación, lo que facilitará las posibles acciones que se puedan acometer.
Además, dentro de cada sector, según el calendario prefijado, se realizará una visita a cada uno de los edificios, tomando diversas muestras en las plantas bajas y se pasará por las viviendas para recibir información de los propietarios y realizar una inspección visual de las zonas de riesgo y de aquellas otras en las que el propietario haya observado e identificado algún signo extraño de presencia de esta plaga.
acciones En función de los resultados que dé el muestreo, se elaborará un informe técnico, se señalarán en el plano las zonas dañadas y se propondrá un plan de actuación detallado y dividido en varias fases de ejecución para realizar el "control racional" del problema existente. Según se informó ayer desde el Ayuntamiento, "será a partir de este punto, cuando se planteará la secuencia de intervenciones a realizar", tanto en el tiempo que se vaya a prolongar la actuación como en el espacio. Además, se dará una estimación del coste que pueda significar el tratamiento de las zonas afectadas.
Finalmente, será necesario planificar un protocolo de seguimiento y control de los resultados. El plazo previsto para el trabajo oscila entre dos y tres meses. Los trabajos que ha encargado el Consistorio incluyen una charla informativa a los vecinos del Casco Viejo, la completa inspección de las viviendas y la elaboración del correspondiente informe y las medidas a tomar.
Aitor Aguinaga es el mismo químico que ya trató hace unos dos años la misma plaga en el barrio de la Chantrea de Pamplona.