elizondo. Alrededor de medio millar de entusiastas acudieron a Amaiur para participar en Errotaren Eguna, el día del molino, que se festeja cada año en uno de estos antiguos establecimientos que se conservan y están en pleno funcionamiento en Urdazubi, en el Valle de Baztan (Amaiur y Elizondo-Elbete) y Malerreka (Zubieta), del centenar que existieron en el Bidasoa. Hubo folklore, charla sobre la historia y recuperación de las ruinas del castillo de Amaiur con visita guiada hasta la cima de Gaztelua donde se encontraba la fortaleza, y degustación del típico talo, la torta de harina de maíz que hace furor como en los mejores tiempos. El gerente del Molino de Amaiur, Felipe Oyarzabal, en presencia del alcalde amaiurtarra Julián Rekalde, entregó el testigo a Santiago Ballarena, titular del Molino de Etxaide, de Elizondo, donde se celebrará la próxima edición del festejo. Foto: ondikol
