El Ayuntamiento de Pamplona y la Asociación Navarra de Víctimas del Terrorismo de ETA (ANVITE) han firmado este martes un convenio de colaboración a través del cual se comprometen a colocar en cada uno de los lugares de Pamplona donde se cometieron atentados perpetrados por la banda una placa como medio de "dignificación" de las víctimas.

El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, y el presidente de ANVITE, José Ignacio Toca, han suscrito, en un acto que ha tenido lugar en el Salón de Recepciones de la Casa Consistorial, un convenio a través del cual el Ayuntamiento se compromete a autorizar a la Asociación Navarra de Víctimas de ETA la instalación de placas en los lugares donde se cometieron cada uno de los atentados perpetrados por la banda en Pamplona, otorgando la correspondiente licencia de utilización del dominio público.

El Consistorio colocará con sus propios medios las placas y las mantendrá en las condiciones de debido decoro que resultan acordes a su función de dignificación. Ayuntamiento y ANVITE formarán una comisión de seguimiento para asegurar el cumplimiento de los puntos que recoge el convenio.

ETA cometió durante su etapa armada un total de 27 atentados en Pamplona. El primero de ellos tuvo lugar el 26 de noviembre de 1977, con el asesinato del comandante jefe de la Infantería Armada, Joaquín Imaz, que fue tiroteado cuando se dirigía a su coche, aparcado en la plaza de toros.

La última víctima de un atentado de ETA en Pamplona fue el ex edil del Ayuntamiento Tomás Caballero, que fue asesinado a solo diez metros de su casa en mayo de 1998.

El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, ha defendido la necesidad del reconocimiento social a las víctimas, algo que "muchas no tuvieron en su momento, que algunas aún siguen sin tenerlo y que sin duda merecen".

A través del convenio suscrito, la Asociación Navarra de Víctimas de ETA se compromete a determinar el texto que ha de recoger cada placa, estableciendo un modelo común para todas ellas.