El diario que más esquelas publica en la Comunidad Foral publicó ayer la esquela política de Enrique Maya y parece que no le ha gustado nada. Ayer mismo, tres horas después de que fuentes oficiales del Ayuntamiento confirmaran que no iba a repetir como candidato, no dudó en ponerse delante de los micrófonos para afirmar que todavía no ha decidido si volverá o no a presentarse, como si pudiera decidir él tal cosa.
La mañana fue una fiesta de idas y venidas, mensajes, ruedas de prensa que se convocan y se suspenden, revuelo por los pasillos… Se ve a la legua que hay problemas. Es evidente que ese periódico ha publicado esta información cuando le ha interesado, que es el momento en que se ha hecho público que la candidata del PSN para el Ayuntamiento de Pamplona será Elma Saiz. Necesitaban eclipsar la noticia y para ello han sacado otra equivalente en peso. Hasta ahí bien, pero ¿a qué viene ahora la pataleta de Maya? ¿No sería mejor aceptar lo que las altas esferas y los señores de Cordovilla ya dan por hecho y dar paso a las nuevas generaciones, después de cumplir un ciclo y bla, bla, bla? La derecha se ha caracterizado por lavar sus trapos sucios en casa, pero esto se les está yendo de las manos. Ahora queda por aclarar si hay o no acuerdo con el PP para intentar hacer otra Navarra Suma o lo que sea. Mañana mismo Cuca Gamarra visitará la Ribera en el intento de rearmar el PPN. Cuidado Cuca, que en Pamplona llueven puñales pero por ahí estallan bombas y de las de verdad. Ahí tienes a Louis Vuitton que ya ha suspendido el rodaje de un anuncio por las prácticas en el polígono de tiro, como hicieron en su día Terry Guilliam con el rodaje de ‘El hombre que mató a Don Quijote’ o Shakira con uno de sus videoclips.
