En 1954
El arquitecto pamplonés Víctor Eusa dirigía la construcción de un moderno y rompedor edificio, en el solar triangular formado en el cruce entre las calles Bergamín y San Ignacio. Sustituía al antiguo chalet de don Deogracias Echarte, que vimos en esta misma sección la semana pasada, y en el momento de obtener la fotografía había alcanzado ya el nivel de su sexta altura.
Como recordarán nuestros fieles lectores, la semana pasada llamábamos la atención sobre dos personajes uniformados, con gorras de plato, que en 1950 contemplaban el chalet de Echarte en sus últimos días de existencia. Uno llevaba gorra y correaje blanco, y posiblemente era un policía municipal, y el otro probablemente era militar. Pues bien, hete aquí que al seleccionar la foto vieja de hoy, de 1954, nos encontramos con que ambos personajes siguen exactamente en el mismo sitio, ¡cuatro años después...! ¡Ahora vais y se lo piais a Iker Jiménez...!
Hoy en día
lo primero y principal, lo más importante sin duda, es comprobar que los dos personajes de uniforme... ya no están. Y lo digo porque al llegar a casa y repasar las fotos no las tenía todas conmigo, y me preguntaba si todavía andarían por ahí los fantasmas de los dos tipos, errantes en el cruce de Bergamín y San Ignacio. Realmente curiosa la coincidencia entre dos fotografías obtenidas con cuatro años de separación...
En otro orden de cosas, diremos que el edificio Aurora fue concluido en 1955, y hoy es considerado uno de los diseños más destacados de Víctor Eusa. Recibió su nombre de la compañía de seguros Aurora, que lo ocupó inicialmente, y tuvo la virtud de adaptarse muy inteligentemente al solar triangular en que hubo de ser levantado. Pertenece a la fase más academicista (y tal vez por eso, la menos imaginativa) de Eusa, y es fácil comprobar que su perfil curvo prefigura el de las torres del edificio de Maristas.
