He oído que el Gobierno vasco va a prohibir toda propaganda y manifiestos de juegos y apuestas en locales y sitios públicos a través de un decreto ley. A mí personalmente, y también a miles de personas, nos parece una buena medida para evitar la ludopatía, sobre todo en personas jóvenes y de mediana edad. Hace unos meses envié una carta al director significando la apertura de un salón de apuestas y juegos en Altsasu, a unos 25 metros de un colegio público (Zelandi), y en un entorno urbano muy habitado. Entiendo que haya gente emprendedora, pero lo que no puedo entender es que los gobiernos locales, autonómicos y el gobierno central puedan autorizar la implantación de salones de juegos y apuestas deportivas en los centros urbanos, muy cerca de colegios y muy cerca de centros comerciales, cuando psicólogos, sociólogos y personal autorizado de las administraciones recuerdan y aconsejan repetidamente los peligros y adicciones que puede traer consigo esta autorización para ubicar estas salas de juegos y apuestas.

En este país ya hemos tenido ciclos de adicciones muy graves a las drogas duras, y también muchos casos de adicciones a los juegos y apuestas, dándose casos verdaderamente escalofriantes con personas menores y también adultas. Por consiguiente, pedimos a los poderes públicos locales, autonómicos y centrales que reconsideren estos casos como corresponde para que al menos estas salas las puedan ubicar fuera de los cascos urbanos y lejos de colegios y grandes superficies comerciales.

En Altsasu parece que nos persigue la desgracia, porque desde los años 80, y en la época luctuosa de la droga, murieron varios jóvenes por sobredosis, un poco más tarde hubo también una oleada de gente ludópata que pasó factura a varias familias, y después de unos años, y en pleno siglo XXI, ocho jóvenes de la localidad se ven envueltos en un incidente con dos guardias civiles con tan mala fortuna que ya llevan casi 3 años encarcelados. Todo esto con la ayuda de algunos líderes de la derecha y también algún periodista impresentable que se pasean por Altsasu provocando y mintiendo como bellacos. Por todo esto solicitamos de las autoridades competentes que eviten situaciones que puedan provocar a corto plazo casos de ludopatía en jóvenes y adultos, no autorizando estas salas en el casco urbano y al lado de escuelas o lugares muy poblados y con grandes superficies.