La presente campaña de salmón Navarra 2019 allá por el mes de febrero se presagiaba esperanzadora. Al término de ésta, y después de lo ocurrido, sacamos las siguientes conclusiones:
Medio Ambiente no quiere incrementar el número de salmones del Bidasoa. Lo achacan todo al dinero. Dicen que se van chorros de dinero en el salmón.
Palabras textuales: “No dais más que trabajo”.
En el Bidasoa hay muchos frentes abiertos, centrales, estiaje de agua, cormoranes, garzas, presas, etcétera.
¿Qué hace Medio Ambiente para solucionar algo de esto? La respuesta es bien sencilla, casi nada.
Se empeñaron en tirar la presa de Endarlatza con el único objetivo de las subvenciones. Flaco favor les hicisteis a los salmones, que en todos los folletos promulgáis la palabra hábitat y eso es lo que habéis destruido, el hábitat del salmón.
Hay una cosa en la que sí son unos verdaderos maestros: imposibilitar la pesca.
Asesorados por un profesor de universidad que más bien parece un biólogo frustrado se dedican a hacer normativas para que no se pesque. Como este año se les donaban los salmones grandes y no tenían cómo echarnos del río, decidieron que el río estaba muy caliente para pescar. Y claro, no se ha pescado prácticamente.
“Bastante hacemos con dejaros pescar”, nos dijeron.
Nuestros peces, ya no solo salmones, truchas, etcétera y demás especies tienen un enemigo claro. La incompetencia del departamento.
