Veo el gesto a menudo, a diario, varias veces al día.La abuela, la jeringuilla, la mano del sanitario y una media sonrisa bloqueada por el miedo.Después el gesto: desabrochar la camisa, mostrar el hombro flácido ante la mirada vacía de todos los presentes.El sujetador con el pequeño aro regulador en color rosa, blanco o tono avellana.Lo vivo como espectadora de un striptease desafortunado, inadecuado y humillante.Todo ello en la sala de enfermería de la residencia, en el centro de salud o en el coche, en el asiento de acompañante con la ventanilla bajada y ante el registro visual de reporteros, sanitarios, viandantes...¿Son necesarias estas imágenes…? ¿En qué medida somos todos responsables de seguir permitiendo estas intromisiones en nuestra intimidad y decencia?Ruego delicadeza a la hora de trasmitir este tipo de imágenes. Gracias.