La familia Garrido-Arana queremos agradecer públicamente al Hospital Reina Sofía de Tudela la magnífica atención médica y humana con nuestro padre. Desde el ingreso en Urgencias y la posterior asistencia diaria en nuestro domicilio, por los médicos y profesionales de Paliativos que no escatimaron atención, tiempo y delicadeza. En momentos difíciles por la pandemia, realizaron un esfuerzo enorme para que los últimos días fueran sin sufrimiento físico, lo que a mi padre, y por supuesto a nosotras, nos sirvió de un valiosísimo apoyo para sobrellevar esos difíciles momentos. También, y por los mismos motivos, agradecemos la atención prestada a los profesionales del ambulatorio de Villafranca, particularmente en estos dos últimos años que tanto los hemos necesitado y tan magníficamente nos han atendido. A todos y cada uno de vosotros, que tanto nos habéis ayudado, GRACIAS.