La alcaldesa de Estella Marta Ruiz de Alda (UPN), ha delegado en el rejoneador Pablo Hermoso, que se retira este año, prender la mecha del cohete “por ser uno de los mejores embajadores de Estella y por todo lo que ha representado para la ciudad”.

Admiro a Pablo Hermoso en su condición de jinete como recortador de reses bravas.

Desprecio (y creo que no estoy solo) su oficio de “rejoneador”. Rejón de muerte (una espada larga elaborada como rejón) que, según la destreza que ese día despliegue, repetirá tantas veces como considere, que le haga quedar bien con su público y consiga su aplauso, añadiendo al animal este suplicio a la tortura de las banderillas clavadas en su cuerpo. Un maltratador de animales, sin otro mérito que lo avale.

Creo que hay estelleses/as por el mundo con un mayor merecimiento social y humano para recibir este honor, antes que cualquier figura taurina.