esde 2015, la derecha navarra suele ir a Madrid a hacer una gira por los medios anunciando el fin de los días que supone que no gobierne ella aquí. Lo hizo Barcina, lo hizo Esparza y lo hacen vía medios afines en cuanto la ocasión es propicia. La imagen que transmiten de su tierra es tirando a pésima, un cacho de mapa insolidario y malo gobernado por oportunistas, piojosos y cuando no asesinos. Ahora, cierta derecha española compara la situación sanitaria de Madrid con la de Navarra en el tema del covid para denunciar por qué se confina Madrid o se le aplica el Estado de Alarma y a Navarra no. Y la derecha navarra calla, calla y calla. Navarra está en una mala situación, con tasas muy altas de positivos, tasas que hay que bajar ya -los dos últimos días son especialmente pésimos-. Y en cifras malas de hospitalizados y fallecimientos, cerca de las líneas rojas si no cambia rápido la tendencia. Pero está -ayer- lejos de Madrid en hospitalizados: un 11% de camas ocupadas por covid y un 23% de las UCI, por un 20% y un 39% de Madrid. Y, además, realiza casi el doble de pruebas PCR por habitante que Madrid -un 85% más- y un 110% más que la media nacional (por lógica si haces más PCR sacas más positivos, el incremento de porcentaje de positivos claro que no sería el mismo que el incremento de porcentaje de pruebas, pero la cifra global sube seguro). Además de eso, Madrid notifica con retraso un 20% de sus positivos, con lo cual el valor de su Incidencia Acumulada en los últimos 14 días queda tergiversado. En todo caso es indiscutible que los números de Navarra son malos, pero a nivel de hospitalizados igual de malos que varias comunidades -Aragón, las dos Castillas, La Rioja y algo más lejos País Vasco- que no son objeto de interés de esa derecha como lo es Navarra. Ante todo este ruido, la derecha de aquí, calla. Digo de aquí porque ya no me atrevo a llamarla ni navarra.