a se saben datos de contagios en edad escolar, aunque se sigue sin saber qué número de contagios hay en un aula que se confina porque uno de sus alumnos ha dado positivo. De los 3 a los 11-12 años se manda a todos a casa y se les hace pruebas, pero no se nos dice si esos positivos primarios han causado posibles positivos secundarios. Pero sí se han dado cifras de contagios en edad escolar: en Infantil -3 a 5 años- ha habido 578 contagios, un 3,2% de las criaturas de esa edad -son unas 18.000-. En Primaria -6 a 11 años- ha habido 2.000 contagios, un 4,8% -son unas 41.600-. Y en Secundaria -ESO, Bachillerato y FP- 3.114 contagios, un 6,77% -son unos 47.000-. Bien, se ve que, conforme más mayores, más contagios. El caso es que ahora veamos los confinados: 3.331 en Infantil, 16.439 en Primaria y 3.679 en Secundaria. En Infantil, con 3,2% de casos se ha confinado al 18,5%, en Primaria con el 4,8% de casos se ha confinado al 40% y en Secundaria con un 6,77% se ha confinado al 8%. La desproporción es muy obvia y evidente y plasma la enorme desigualdad existente entre ciclos formativos. Los alumnos de Infantil no llevan mascarilla en clase, así que se puede comprender desde un punto de vista preventivo que puedan llegar a ser confinados si uno de ellos da positivo -aunque las cifras digan claramente que apenas se contagiarían entre ellos-. Los de Secundaria llevan mascarilla, pero hacen falta cinco positivos para confinar a 1 alumno o alumna que no haya dado positivo -solo se considera contacto estrecho a unos pocos, el ratio es de 1,18 confinados por positivo-. En Primaria, con mascarilla, se confina a 8,2 niños por cada positivo, el ratio de lejos más elevado, sin tampoco evidencia de ninguna clase de transmisión interna. Hasta los 12 años, el % de contagio es menor que la media. Urge revisar ese protocolo muy punitivo sobre todo en Primaria y también en Infantil.