La Mancomunidad de la Comarca de Pamplona (MCP) celebró el día 20 de este mes su Asamblea General. En ella, UPN presentó una moción que fue defendida por el concejal de Pamplona Juan José Echeverria y que fue rechazada en votación por la mayoría de las personas asistentes.

Este hecho no es nuevo. UPN se está demostrando incapaz de llegar a acuerdos con nadie, por lo que, generalmente, sus propuestas, tanto en los órganos de la MCP como en el propio Ayuntamiento de Iruñea, son derrotadas.

Tampoco es nuevo el delirante estilo de defensa de sus mociones. Delirante y falso. Faltos de argumentos con los que defender sus propuestas en el Ayuntamiento, incluso ha habido ocasiones en que la propia señora Ibarrola ha utilizado conversaciones privadas, algo que, además de ser muy poco ético, es políticamente paupérrimo.

Hace unos días el señor Echeverria, de UPN, acusaba en el Ayuntamiento de Pamplona al consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, señor Jose Mari Aierdi, de Geroa Bai, de ser el causante de la ruina de los agricultores, en una clara demostración del desconocimiento de UPN de la grave y multifactorial problemática que afecta a las y los agricultores en Navarra (y en toda Europa por lo menos). Lo que está claro es que quien desconoce la causas de los males –UPN–, difícilmente encontrará soluciones a los mismos.

Pero el rizo lo rizó dicho señor Echeverria en la asamblea de la MCP. Para defender su moción, además de cebarse sobremanera con el consejero Aierdi, y de hacerle también responsable de casi todos los males que afectan a la MCP (de la que Aierdi no es miembro), recurrió nuevamente a la falsedad y a la mentira como argumento. Así, el señor Echeverria criticó “la onerosa compra –por parte de la MCP– de los terrenos al Gobierno de Navarra, por 11 millones de euros, terrenos que el Gobierno ahora está prácticamente regalando a empresas privadas”, según dijo. Incluso llegó a mencionar las cifras supuestamente pagadas por estas empresas privadas por los terrenos, cifras irrisorias que provocan vergüenza ajena por lo falsas que son. Porque lo cierto es que los terrenos se han vendido al mejor postor privado y, desde luego, no se han regalado. De hecho, la empresa coreana que ha comprado cerca de 100.000 metros cuadrados en la misma Ciudad del Transporte donde los compró la MCP, ha pagado por ellos 15,5 millones de euros. Mientras que la MCP pagó a 94 euros el metro cuadrado, la empresa coreana que quiere implantar ahí una planta de ensamblaje de baterías para los vehículos eléctricos de VW ha pagado el metro cuadrado a un precio bastante superior al que pagó la MCP. “Prácticamente un regalo”, en opinión de UPN. Y así todo…

¿Llegará el día en que UPN defienda sus propuestas con auténticos argumentos? ¡Sinceramente, esperamos que sí!

Los autores son concejales de Geroa Bai en el Ayuntamiento de Iruñea