Abril de 2017. El colegiado David Lozano señalaba el final del partido en las instalaciones deportivas de Tajonar y Osasuna se proclamaba campeón de División de Honor al doblegar al Getxo (2-0) con un doblete de Iván Martínez. Entrenados por David García Labayen, Jesús Areso, Jon Moncayola y Javi Martínez, que coincidieron juntos en Mallorca con el primer equipo, fueron partícipes de ello.

Aquella plantilla, en la que destacaban nombres como Aitor Lorea -al que Joaquín Caparrós le hizo debutar con el primer equipo en Copa del Rey- o Imanol Jericó -internacional con España en la sub17- consiguió alzarse con un título doce temporadas después, y supuso el quinto, y último, de la historia rojilla en la categoría hasta ahora.

La plantilla del División de Honor de 2017 festeja el campeonato en Tajonar. Foto: Mikel Saiz

El ver a los tres canteranos jugando en Mallorca con el primer equipo es, para el propio David García, motivo como para estar "orgulloso, porque al final es lo que se te queda en el recuerdo, el ver que algunos jugadores se van asentando o asomando la cabeza en el primer equipo, a pesar de que es muy difícil llegar hasta ahí".

El preparador, que lleva 23 de sus 28 años ejerciendo la profesión en las categorías inferiores de Osasuna, reconoce que "al final es para lo que se trabaja, para intentar que lleguen al primer equipo. Pero son momentos muy bonitos ganar campeonatos en el trayecto de los jugadores. Escuchaba a Areso decir que uno de los mejores recuerdos fue ese, que fue súper bonito, por el equipo como grupo, como por las personas increíbles que lo componían. Y lo culminamos ganando un título que hacía años que no se ganaba. Pero como en cualquier cantera, el objetivo final es que el mayor número de chavales lleguen al primer equipo".

"Ese fue el año del que más satisfecho estoy. Es un bloque en el que varios jugadores han llegado al Promesas, tres ya forman parte del primer equipo, y ese fue, además, un año en el que el cuerpo técnico empezamos a trabajar el análisis de vídeo con los rivales, con nuestros partidos y fue un año que se culminó siendo campeones y jugando la Copa del Rey", agrega.

David García no se perdió el encuentro de los que fueron sus pupilos. "Me sorprendió gratamente cuando vi la alineación. Monca está asentado, a Javi le ha costado algo más, pero tiene sus minutos y va teniendo protagonismo aunque no sea siempre de inicio y Areso, no me lo esperaba, pero no por eso deja de ser motivo de alegrarse. Nada más acabar el partido les escribí un mensaje, porque mantengo relación con ellos, y el mismo Javi fue el que me dijo que estaban los tres. Para ellos también es un orgullo", reconoce.

Diferentes caminos, mismo destino

Jon Moncayola, Javi Martínez y Jesús Areso han tomado diferentes caminos hasta llegar al primer equipo. Mientras que el de Garínoain tuvo un breve paso por Tercera en las filas del Iruña -tercer filial de la entidad-, y el soriano subió al Promesas, el lateral cascantino hizo las maletas para marcharse a las categorías inferiores del Athletic de Bilbao.

"Aquel era un bloque en el que cualquiera podría haber dado un paso más. Ha sido una camada de jugadores muy buena. Prácticamente de ese equipo 14 de 18-19 han podido llegar al Promesas y no he visto nunca que tanta gente llegara de golpe al filial. Dar el paso al primer equipo es más complicado, pero que de una camada estén tres tampoco es lo más habitual", destaca el preparador, que añade explicando que "hay jugadores como los Jorge Herrando o Aimar Oroz, que ya estaban haciendo pretemporadas con el primer equipo y parece que les cuesta más. Son momentos que los jugadores aprovechan. Al final hay quienes tienen esa ultima oportunidad y la tienes que aprovechar, porque nadie te va a regalar nada".

Al año siguiente de proclamarse campeón, Jesús Areso se marchó al Athletic de Bilbao. Aun así, el técnico no ha perdido la vista a un jugador que ha sido "muy importante. Mentalmente ahora le veo muy fuerte. Antes era más niño, pero creo que la experiencia que ha tenido, tanto a nivel deportivo como personal, le hace que pueda saber manejar las situaciones que le vengan ahora. Vamos a tener un jugador para muchos años".

Por otro lado, mientras que analiza que a Moncayola le ha servido la experiencia en Tercera con el Iruña, García también detalla que a "Javi le ha costado más que a Monca, tuvo más problemas con las lesiones aunque llegara antes al filial y le ha costado hacerse como futbolista. Este año ha dado un paso importante en el aspecto físico y táctico y es un jugador muy inteligente. Veo otro Javi ahora en Primera".

El propio jugador de Ólvega reconocía en la rueda de prensa que ofreció tras estrenarse como goleador ante el Valencia la temporada pasada la fortaleza mental que ha tenido en todo este proceso, algo "que se va aprendiendo, pero como todo en la vida hay gente que es capaz de manejar ciertas situaciones cuando no te va bien. Cuando tan joven das ese salto parece que todo es muy fácil y no es así. Físicamente el proceso de hacerse futbolista ha ido más lento que Monca, que era ya potente en juveniles", apunta David García, que desvela que en su día se tomaba "muchos cafés con él. Lo pasó mal porque era de fuera y no lo pasó bien porque echaba de menos a la familia. Hace años era el entrenador el que hacía esa labor psicológica con chicos como Javi que vienen de fuera y estaban en residencias".

El entrenador concluye que el hecho de que sigan jugando juntos "depende de ellos primero, porque Jagoba les va a dar oportunidades. A Areso le va a costar más porque se le nota el año parado y tiene buena competencia, pero Nacho Vidal no va a jugar todo el año. Tiene que esperar".