Señores de la FIFA, ya sé que no van a leer estas humildes letras, pero si no les importan, no paren el calendario de Osasuna por el Mundial. Que se siga jugando. Solo lo de los rojillos, los demás no hacen falta, como si se quieren ir de vacaciones. ¿Nos van a dejar ahora casi dos meses sin este Osasuna? ¿Están de coña? Que algún alto ejecutivo use sus contactos para algo de utilidad para el socio rojillo y que esto no se pare.

Que sí, que el Mundial, ese por el que han muerto miles de personas y está fuera de calendario por arte de birlibirloque. Que juega Messi y no se quién. Pero el bueno de Argentina parece que no va a ir, así que además de Abde y Budimir lo de los mejores va a ser que no. 

Ahora en serio, Osasuna ha conseguido, más allá de lo que pase en la última derrota de Piqué como jugador en activo el martes, un primer tramo de la temporada en el que se ha disparado la ilusión como pocas veces se recuerda. El partido contra el Celta es de victoria de equipo al que le sale todo. Un delantero desatado que convierte dos goles en media ocasión, unos jugones como pocas veces se habían visto por estas tierras, una defensa de escándalo y dos porteros de alto nivel. Que si se lesiona Sergio estará Aitor y al revés. 

No es que los rojillos hicieran un encuentro como el del Valladolid, pero no hizo falta. Tiraron del acierto del Chimy en un área y luego supieron ser lo suficientemente sólidos para sufrir lo justo y necesario contra un equipo necesitado que obviamente iba a buscar casi desesperadamente por lo menos un punto.

Y ahí es donde apareció Aitor. Entre él y los García solventaron los problemas más o menos graves que crearon Aspas y compañía. A 17 puntos del primer objetivo. En 13 partidos. Tela. Y ahora que venga el Barcelona o quién quiera, Osasuna no tiene nada que perder. Y después...Infantino, sea majo, que no podemos estar dos meses sin ver a esta gente. l