Los próximos compromisos de Osasuna visibilizan un calendario complicado y exigente para los rojillos, con dos encuentros seguidos en El Sadar antes de realizar dos desplazamientos continuos. 12 puntos en juego para tratar de sumar los máximos posibles y alejar cualquier tipo de fantasma que se haya instalado en la afición navarra, fruto de este inicio liguero que, en números, no es mejor que el anterior y ya le presenta una serie de ‘debes’ a los pupilos de Jagoba Arrasate.

Disputadas las cinco primeras jornadas de competición, Osasuna ha logrado sumar seis de los quince puntos posibles que han estado en juego, fruto de dos victorias y tres derrotas, las dos últimas, ante Barcelona y Getafe, de manera consecutiva. Si bien es cierto que el calendario le presentó al cuadro rojillo un exigente comienzo en El Sadar, recibiendo en los primeros cuatro partidos a Athletic, Barcelona, Sevilla y Atlético de Madrid, lo cierto es también que ahora le viene a la entidad tres compromisos no menos sencillos en las próximas cuatro jornadas, ya que, a los mencionados duelos ante andaluces y madrileños, los navarros afrontarán después dos salidas, ante el Alavés y el Real Madrid.

El de este sábado será un nuevo reencuentro de Osasuna con Mendilibar, tres temporadas después de que visitara el feudo rojillo con el Eibar. ‘Mendi’ apenas dirigió una docena de encuentros al Alavés al curso siguiente, pero no pudo aportar su granito de arena a la permanencia del conjunto babazorro, que al finalizar la temporada consumó su descenso a Segunda División, y cogió al Sevilla el pasado curso cuando Osasuna ya había disputado todos los encuentros posibles ante el cuadro andaluz, con pleno de victorias rojillas tanto en la competición doméstica como en la eliminatoria de cuartos de final de la Copa del Rey.

Precisamente el reencuentro con el Alavés se asoma por el horizonte, pero antes, Arrasate se enfrentará a su ‘bestia negra’: el Cholo Simeone, el único entrenador que ha sido capaz de batir al de Berriatua en todos (diez) encuentros que han disputado desde que el vizcaíno lograra el ascenso a Primera División hace seis campañas. Además, se da la circunstancia de que se medirán, una vez más, los dos entrenadores que más tiempo de seguido llevan dirigiendo a sus equipos en Primera División. Así las cosas, los rojillos cerrarán este tramo exigente del calendario visitando el Santiago Bernabéu para medirse al Real Madrid en un escenario en el que han logrado puntuar en las dos últimas temporadas.

Estrenar el casillero en casa

Repitió Jagoba Arrasate en la rueda de prensa posterior al partido ante el Getafe las palabras “corregir” y “mejorar” y ese margen que tiene el equipo pasa por buscar la solidez defensiva de los cursos anteriores y empezar a estrenar el casillero de puntos y victorias ante la afición, por lo que los duelos ante Sevilla y Atlético de Madrid son las dos primeras oportunidades para romper el hielo tras las derrotas sufridas ante Athletic y Barcelona.

El Sevilla, que disputó anoche su primer encuentro en Liga de Campeones, no ha tenido el mejor inicio de temporada posible con tres derrotas y una victoria en los cuatro partidos que ha disputado el equipo hispalense. El cuadro de Mendilibar cayó derrotado en su único desplazamiento realizado hasta la fecha y, pese a que viene de ganar su último compromiso liguero y estrenar su casillero de puntos, las aguas no corren tranquilas por su cauce.

El curso pasado, la fortaleza de Osasuna residió en El Sadar, donde sumó 12 de las 15 victorias que logró en la temporada, así como un empate adicional. Solamente cayó derrotado en seis de los 19 compromisos ligueros. En Copa del Rey, los rojillos contaron como victorias los dos duelos disputados.