La semana de Sheraldo Becker: historia y reencuentro
Se juega en la madrugada del miércoles clasificarse al Mundial y recibe la visita de la Real
Surinam vive días de auténtico vértigo futbolístico. La selección caribeña está a un solo partido de sellar una clasificación histórica al Mundial, algo jamás logrado por el país. Pero para su gran referente ofensivo, Sheraldo Becker, esta semana guarda un doble significado: la posibilidad de liderar a Surinam hacia la gloria (Guatemala, a las 2.00 del miércoles) y, apenas unos días después, disputar un encuentro especialmente simbólico contra la Real Sociedad, el club del que recaló en Osasuna este pasado verano.
El sueño mundialista, a 90 minutos
Después de una campaña clasificatoria sorprendente, Surinam llega al choque definitivo con opciones reales de quedar primera de grupo y obtener el billete directo al Mundial. La solidez mostrada en el 4-0 contra El Salvador ha reforzado la confianza del grupo, que afronta el duelo final con la convicción de que están a las puertas de un momento que podría transformar para siempre el destino del fútbol surinamés.
En este contexto, Becker representa mucho más que un delantero: es el futbolista que aporta experiencia, jerarquía y una mentalidad competitiva curtida en las grandes ligas europeas. Su regreso a la convocatoria ha sido recibido como una inyección de optimismo para un país que sueña despierto. Un partido que llega hasta con polémica por sus rivales, Guatemala, quien tiene cuentas pendientes con Panamá, selección que pelea el billete directo contra Surinam.
Becker, entre la historia de su país y un reencuentro muy especial
El calendario ha querido que esta semana sea un torbellino emocional para Becker. Si Surinam certifica su clasificación, lo hará a mediados de semana. Apenas unos días más tarde, el delantero deberá volar de vuelta a Navarra para vestir la camiseta de Osasuna en un duelo de alto voltaje… ante la Real Sociedad, el club que lo traspasó este verano al club rojillo.
Para Becker, el reencuentro será mucho más que un simple partido de Liga. El jugador, que no termina de contar para Lisci, puede tener una oportunidad ante la cantidad ingente de bajas con las que cuenta el entrenador, aunque le penalizará el poco tiempo que estará
El choque contra la Real llega, además, en un contexto deportivo importante para Osasuna, que confía en la velocidad, desborde y pegada del delantero para encadenar resultados positivos. El propio Becker ha expresado en varias ocasiones su afecto por la entidad donostiarra, lo que hace prever un recibimiento cálido por parte de la afición txuri-urdin.
Una semana que puede definir su carrera
Para Surinam, la clasificación sería un acontecimiento histórico; para Becker, podría ser la semana en la que se combine el mayor logro internacional de su carrera con un regreso cargado de simbolismo. Pocos jugadores pueden decir que en cuestión de días se juegan la entrada a un Mundial con su país y un reencuentro sentimental contra su exequipo.
El balón está a punto de rodar. Y Becker, en el centro del escenario, se dispone a vivir una de esas semanas que pueden definir una carrera… y, quizá, cambiar para siempre el destino futbolístico de un país entero.
