pamplona - El Ayuntamiento de Pamplona con representantes de todos los grupos, incluido EH Bildu con el alcalde, Joseba Asiron, a la cabeza, homenajeó ayer en el 19º aniversario de su asesinato a manos de ETA al entonces concejal de UPN Tomás Caballero. Al acto, además de la familia de Caballero, asistió una nutrida representación de representantes políticos de todos los partidos y de diversas instituciones, como la presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, el expresidente Miguel Sanz; o la delegada del Gobierno, Carmen Alba.

Esta amplia representación, y especialmente la asistencia de concejales pamploneses de todos los grupos, fue destacada y agradecida por Javier Caballero, hijo del edil asesinado, quien tomó la palabra en nombre de la familia, ante el nicho que guarda sus restos en el cementerio de San José.

Javier Caballero reconoció que los años transcurridos desde el “terrible” 6 de mayo de 1998 deben ser “19 aldabonazos”, aunque señaló que el acto de ayer “es importante, más aún en la medida en que está la representación de todos los pamploneses”. Es este “un gesto que, sin duda, ayuda”, valoró, aunque advirtió que “mucho más importante que un gesto es nuestra actuación en el día a día, nuestro compromiso permanente, nuestro compromiso sincero en la construcción del futuro” que deseó sea “un futuro con valores y compromisos éticos y morales”.

Por ello, Javier Caballero, pese a su deseo de ser “optimista” y asegurar que “el pasado no puede ni va a volver a repetirse”, advirtió que “no se puede pasar página como si nada hubiera ocurrido” y apuntó que “es el recuerdo de quienes han quedado en el camino el que debe cimentar la convivencia”.

“Este acto solo tiene sentido si sirve para reconocer el daño causado, para proclamar el inmenso error que ha supuesto la existencia de ETA y para exigir su disolución. Solo tiene sentido si con la misma unidad con la que recordamos la memoria de mi padre exigimos a los asesinos que se esclarezcan todos los asesinatos que han cometido”, instó.

Rodeado de su madre, Pilar Martínez, de sus cuatro hermanos y de los hijos de todos ellos, recordó que su padre fue asesinado “por representar a la mayoría de los pamploneses, a los que se quiso acallar la voz”, y extendió el homenaje “a todas y cada una de las 26 víctimas que ETA ha dejado en la ciudad”.

Se refirió sin citarlo expresamente al abandono de las armas por parte de la banda terrorista, y valoró que “la mayoría de la sociedad ha sabido construir la paz, ha sabido vencer a ETA precisamente por esa mayor altura moral, por esa mayor dignidad”. Al respecto, señaló que los “19 aldabonazos que debemos sentir en nuestras conciencias” por cada uno de los aniversarios del asesinato de Tomás Caballero deben servir “para poder construir entre todos el futuro de libertad, de justicia y de paz por el que mi padre luchó y que le costó la vida”, subrayó.

El párroco de San Lorenzo y delegado diocesano, Javier Leoz, presidió el responso, en el que el alcalde, Joseba Asiron, colocó una corona de flores ante el nicho de Caballero, donde también el presidente de UPN, Javier Esparza, dejó otra. - Efe