Puerta de la cárcel de Pamplona, 1999

En 1999, y más concretamente el 28 de septiembre, la prensa fue autorizada a entrar en la cárcel de Iruñea, y entre los fotógrafos acreditados se encontraba el gran Joxe Lacalle, que amablemente nos ha cedido la foto de hoy. El motivo para organizar la visita, según leemos en los periódicos del día 29 de septiembre, era la inauguración del nuevo módulo de mujeres, que contaba con 10 celdas de 9 metros cuadrados, y tenía capacidad para 20 personas.

La fotografía muestra la puerta de acceso al edificio carcelario propiamente dicho, no la entrada principal de la cárcel, que es la que generalmente solía reproducirse. Vemos que está constituida por un arco de medio punto, decorado con cajeados, y rematado por una crestería que centra el escudo español. Sobrecoge pensar cuántas historias de dolor y tristeza habrán cruzado el umbral de esta puerta, desde que fuera construida allá por el año 1908...

Hoy en día, la puerta de acceso es lo único que queda de la vieja cárcel de Pamplona, después de que el edificio fuera derribado en septiembre del año 2012. La demolición, realizada de manera deliberadamente precipitada, levantó protestas en muchos sectores de la población, que creían que debiera haberse tenido en cuenta que se trataba de un espacio de memoria, tanto de la represión franquista como de la lucha de los insumisos en los años 80-90.

Esta deuda comenzó a ser saldada en octubre de 2018, cuando el ayuntamiento de cambio bautizó como parque de la Insumisión el solar donde estuvo el presidio. Pero quedaba aún una cosa por hacer, rescatar la vieja puerta de un almacén y colocarla en su lugar. La inauguración, llevada a cabo el 10 de febrero de 2023, se produjo entre vibrantes y encendidos discursos, entre ellos los del mismo alcalde que ordenó su demolición en 2012. Coherencia, oyes...