Desde hace varios años Nabarralde organiza una serie de jornadas en torno a distintas manifestaciones del patrimonio: patrimonio industrial, el paisaje, el comercio, los caminos… En esta ocasión se celebrará una jornada sobre la pelota vasca bajo el título Jai-Alai, cultura, identidad y deporte, con un evento central de reflexión y debate que se celebrará el 18 de octubre en la sede de la Mancomunidad de Pamplona y que aunará a expertos y expertas de diversos ámbitos del deporte vasco por antonomasia, como Andrea Lusarreta, Tiburcio Arraztoa, Maite Ruiz de Larramendi o Kiko Caballero, entre otros y otras.
La jornada contará además con un programa de actividades complementarias, conformada por una exposición sobre pelota organizada por Napike, varias visitas guiadas y el estreno del documental Piedra. Hierro. Cuero. Euskal Jai, 100 años de historia, del realizador navarro Imanol Martínez.
Este año, y coincidiendo con la declaración institucional de Iruñea como Capital Mundial de la Pelota Vasca, la jornada se centrará en la pelota y su importante valor patrimonial entre los vasconavarros. Para su organización y desarrollo contamos con la colaboración del Ayuntamiento de Pamplona y la Federación Navarra de pelota vasca. “Y es que la pelota es una de las manifestaciones culturales más características de nuestra sociedad. Deporte, espectáculo, juego de niños (también de mayores), rito habitual del programa de fiestas en muchas poblaciones de la geografía navarra… Por otra parte, el frontón es el lugar destinado para jugar a pelota. Conforma un recinto consagrado a la celebración por excelencia, caracterizando a menudo la plaza del pueblo”, explican desde Nabarralde.
“De este modo, en torno a la pelota confluyen varias expresiones del patrimonio material e inmaterial del país: el juego, parte significativa de la cultura, que adopta formas de rito deportivo y de fiesta; el frontón, como escenario físico, arquitectónico, que se confunde con la misma plaza local, lugar de patrimonio urbano, material. Por añadidura, la tradición de este deporte-fiesta da ocasión para otras expresiones patrimoniales colaterales: el rito de las apuestas, los oficios (cestero, fabricante de guantes, pelotas…), las escuelas de pelotaris”.