Recuerdo de la fuga de Segovia

con motivo del 38 aniversario de la Fuga de Segovia, la mayoría de los protagonistas de la histórica huida se reunieron el pasado sábado en la localidad de Auritz-Burguete. Los presentes ascendieron al monte Atalozti, donde se encuentra el monolito en honor a Oriol Solé Sugranyes, y tras el homenaje se proyectó en la casa de cultura de la localidad el documental de Gemma Serrahima realizado por Joan Rossell titulado The Segovia Big Band: conversaciones con sus protagonistas.

Los asistentes al homenaje ascendieron al punto del monte Atalozti donde se encuentra hace siete años el monolito en honor a Oriol Solé Sugranyes, lugar donde el participante de la evasión fue abatido el 6 de abril de 1976. Según el alcalde de Auritz-Burguete, Joxepe Irigaray, junto al monolito donde se reflejan la fecha de nacimiento y fallecimiento del catalán, se encuentran dos piedras con un significado importante. Una de ellas proviene del pueblo donde nació Solé y la segunda de donde falleció, Auritz-Burguete; "las dos separadas mirando hacía Urepel, destino de la fuga".

Entre los presentes se encontraba la madre de Solé, de 94 años, junto a 22 de los protagonistas de la histórica huida. Tal y como comentó el cineasta Ángel Amigo, también participante de la fuga, "el ambiente que se vivió en el acto reflejaba la existente unión que sigue viva entre nosotros". "A pesar de los años transcurridos, la Fuga de Segovia ha sido un acontecimiento que ha permanecido en la memoria de todos como algo muy cercano puesto que se ha quedado grabado", precisó. Asimismo, a pesar de la niebla que les acompaño durante la mañana, Ángel Amigo destacó que "el paisaje sigue igual y la gente lo ha reconocido con total naturalidad".

Tras el homenaje en el monolito, se proyectó en la casa de cultura de la localidad el documental de la sobrina de Oriol Solé Sugranyes, Gemma Serrahima, realizado por Joan Rossell, en el que se reflejan las vivencias de los protagonistas. - D.N.