Unas elecciones con sabor a primera vuelta

Pamplona. Los colegios electorales han abierto sus puertas con normalidad en toda Navarra a las 9:00 horas para que los ciudadanos puedan ejercer su derecho al voto en estas elecciones generales a las que se han presentado en la Comunidad Foral diez candidaturas al Congreso y siete al Senado.Las mesas se han constituido con normalidad, salvo alguna pequeña incidencia que no ha llegado a afectar al proceso, y los colegios han abierto a la hora prevista, según han informado a Efe fuentes de la delegación del Gobierno en Navarra.Entre las 9,00 y las 20,00 horas, los ciudadanos navarros pueden votar en un total de 976 mesas distribuidas en 358 locales electorales, en los que habrá disponibles 2.300 urnas y 976 cabinas.

Si la votación se llega a interrumpir, el horario deberá prorrogarse durante tanto tiempo como hubiese durado la interrupción.Los miembros titulares y los suplentes han acudido a los colegios electorales a los ocho de la mañana para constituir las mesas electorales y comprobar el material y la documentación correspondiente para el desarrollo de la votación.Cada mesa está formada por un presidente y dos vocales, designados por sorteo público y hay dos suplentes por cada uno de los miembros de la mesa electoral.Los cargos de presidente y vocal de las mesas electorales son obligatorios, de manera que se considera delito electoral que las personas que han sido designadas para integrar las mesas no se presenten el día de las elecciones para cumplir con este deber.Según la normativa electoral, los presidentes, vocales y suplentes que dejen de concurrir a desempeñar sus funciones, las abandonen sin causa legítima o incumplan sin causa justificada las obligaciones de excuso o aviso previo incurrirán en pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a veinticuatro meses.Los miembros de las mesas electorales cobrarán una dieta de 65 euros. Su labor es la de controlar la votación y también contar los votos ayudados, si lo precisan, por interventores y apoderados.

Para esta elecciones en Navarra se han impreso un total de 4.825.941 papeletas, de las cuales 449.085 son para el Senado y 4.376.856, para el Congreso. Los sobres para el Congreso son blancos y para el Senado sepias y deberán ser depositados en sendas urnas.Las listas al Congreso son Navarra Suma (UPN, Ciudadanos y PP), Geroa Bai, EH Bildu, Unidas Podemos, PSN, Vox, PACMA, ASyPA, PUM+J, y Recortes cero-GV y las presentadas al Senado son las de Cambio-Aldaketa (Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E), Navarra Suma, PSN, PACMA, Vox, PUM+J y Recortes cero-GV.En total se elegirán 350 diputados y 208 senadores entre las 582 candidaturas que compiten para tener representación en el Congreso y las 604 que lo van a intentar en el Senado.En la Comunidad Foral en estos comicios un total de 507.094 personas, de las que 479.940 son residentes en España y el resto (27.154), en el extranjero, están llamadas a las urnas.

Para estas elecciones, se han tramitado 21.148 solicitudes de voto por correo: 18.646 desde España y 2.502 desde el exterior, una cifra inferior a la de los últimos comicios generales, los de junio de 2016, en los que se tramitaron 25.148 solicitudes (22.775 de residentes en España y 2.373 procedentes del exterior).Por la seguridad del proceso velarán 1.640 agentes, de los que 310 corresponden a Policía Nacional; 970, a Guardia Civil; 200, a Policía Foral; y 150, a la Policía Municipal de Pamplona.

La primera incógnita será medir el grado de la irrupción de la extrema derecha en el panorama nacional, y su influencia real en el futuro Congreso. No solo por su capacidad para conformar mayorías que puedan ser determinantes, también su fuerza para condicionar los discursos del resto de partidos de la derecha. Un buen resultado puede tener además un efecto rebote un mes después en las elecciones autonómicas, facilitando su presencia en el próximo Parlamento foral.

En el campo de la derecha será la oportunidad de testar también el peso de la alianza electoral que presentan UPN, PP y Ciudadanos, que confían en aglutinar todo el espectro de la derecha y evitar la fuga de votos a Vox. Queda por ver también en qué medida influye, si es que lo hace, el antiforalismo de Ciudadanos en un espacio sociológico movilizado y que tiene como objetivo prioritario recuperar el poder cuanto antes.

Nuevo eje electoral La presencia de Vox y la radicalidad de algunas propuestas de PP y Ciudadanos ha movido el eje del debate en Navarra. Lo que en 2015 fue un pulso entre las fuerzas del cambio y las fuerzas del régimen, esta vez es un claro derecha-izquierda que puede determinar también una recomposición del voto entre las fuerzas progresistas de la comunidad. El PSN aspira a aprovechar el aire favorable que le llega de Madrid para recuperar el segundo puesto en las elecciones generales, mientras que Podemos confía en mantener la gran mayoría del voto recibido en las anteriores.

Entre unos y otros se sitúan EH Bildu y Geroa Bai, con la dificultad de lograr visibilidad en un debate político prácticamente monopolizado por los líderes de los grandes partidos. Ambos partidos perdieron en 2015 el escaño que habían logrado cuatro años antes, y que ahora esperan recuperar con un discurso de defensa del autogobierno en un contexto en el que arrecian las propuestas que plantean una recentralización del Estado.

La lectura de los resultados en cualquier caso quedará vinculada a lo que ocurra en Madrid, el verdadero foco de interés de esta noche. Todas las encuestas apuntan a una victoria del PSOE que, sin embargo, puede no tener una mayoría de gobierno, mientras que las tres derechas confían en superar las previsiones y sumar los suficientes escaños que les permita recuperar el poder en la Moncloa, que es a fin de cuentas lo que está en juego hoy.

Los resultados darán después para muchas interpretaciones. También en Navarra, donde las elecciones, que son en clave nacional, tendrán una lectura de interés de ámbito regional. Serán una referencia para quienes obtengan un buen resultado, y un punto de paso para quienes confíen en mejorar los resultados obtenidos hoy en un contexto poco favorable. Valoraciones que en cierto modo servirán como primer acto electoral de la campaña para las autonómicas y municipales. Que aunque oficialmente no da comienzo hasta la noche del 9 el mayo, continuará ya de manera ininterrumpida en un esprint final que empieza tras el recuento de esta noche.