El candidato del PSC al 14-F, Salvador Illa, afirmó ayer que si es presidente de la Generalitat formará un Govern "cohesionado" que dará estabilidad a Catalunya, que, en su opinión, no se puede permitir seguir con el "espectáculo" de la división del actual ejecutivo de JxCat y ERC. "Estamos dispuestos a asumir la responsabilidad de construir un Govern progresista, dialogante y solidario; un Govern que trabaje con decisión y con cohesión. El espectáculo que hemos visto de un Gobierno dividido no nos lo podemos permitir", señaló en un acto desde Tarragona, en el que también intervino el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Tras una "década perdida por el procés", a juicio de Illa ha llegado el momento de dejar atrás la "política de trincheras" basada en "debates estériles, absurdos e inútiles" para dar paso a "soluciones reales para problemas reales". "No quiero perder ni un minuto más en la guerra de banderas", exclamó. De hecho, anunció su voluntad de recuperar "la confianza y la seguridad jurídica para impulsar nuevos proyectos de política industrial" con los que pretende "impulsar el desarrollo económico, generar nuevas áreas de centralidad, reforzar la formación profesional dual y generar ocupación de calidad". El candidato insistió en que el PSC representa el voto útil con el que se conseguirá materializar "las propuestas para mejorar las vidas que quedaban eclipsadas por el debate territorial" del proceso independentista.

Por su parte, el presidente Pedro Sánchez reafirmó la tesis de Illa al vaticinar que está próximo el "fin de la época oscura del desgobierno". Se debe, a su juicio, "poner fin y pasar página de los desgobierno independentistas que no han gobernado para la Catalunya real".