Maiorga Ramirez ha emplazado esta mañana a Eba Blanco a convocar unas nuevas primarias para dirimir definitivamente la elección del secretario general de Eusko Alkartasuna (EA).
El parlamentario navarro, cabeza visible de la facción crítica de EA que ha denunciado la manipulación del partido por parte de los oficialistas, ha dado una rueda de prensa en la que ha exhibido un auto del juzgado de primaria instancia número 7 de Vitoria que se remite a la sentencia que ya vio irregularidades graves en el anterior proceso de primarias y rechaza el enésimo recurso presentado por Blanco.
El auto lo que hace es desestimar la petición de incidente excepcional de nulidad de actuaciones que había interpuesto la dirección de Blanco, en lo que Ramirez cree que ha sido una maniobra para dilatar el proceso y no solucionar el problema de fondo. “Este auto lo que acredita es que el tiempo de los tribunales se ha acabado”, ha considerado Ramirez, que ha insistido en que la única salida que queda ya es la convocatoria de un proceso de primarias abierto, transparente y con garantías, que dirima este episodio “poniendo urnas en los alkartetxes”.
Ramirez ha vuelto a recordar que los tribunales ya han sentenciado que su derecho fundamental de asociación fue vulnerado y que la única forma de repararlo era convocando un nuevo proceso. Por eso el parlamentario ha dicho que lo razonable es que, tras este “enésimo” aviso de los tribunales, Blanco asuma que toca dar la voz a la militancia y convocar unas primarias en el plazo de quince días.
De no asumir esta nueva resolución, Blanco estaría “en rebeldía”. Algo que es grave, por varios motivos. Primero, por lo que supone de negarse a dirimir esta polémica mediante el “diálogo y la democracia”. Pero también porque la estrategia de Blanco de recurrir absolutamente todos estos pronunciamientos, hasta el punto de valorar acudir hasta el Constitucional, supone alargar un proceso agónico que se lleva esfuerzos y una “merma de recursos tremenda”, ha considerado.
También ha sido significativo que Ramirez haya apelado directamente a EH Bildu cuando ha hablado de que todo este capítulo también le afecta. “Esta actitud de Blanco lastra a EH Bildu, porque EH Bildu tiene en sus estructuras a personas que han sido nombradas en un congreso que ha sido anulado por la justicia”, ha avisado. “En nuestro frontispicio político está el derecho a decidir”, ha insistido Ramirez, que cree que todo este proceso daña precisamente esa máxima política tanto de EA como de EH Bildu.
La respuesta de EA
Poco tardó la facción oficialista en contestar a Maiorga Ramirez. En un comunicado, EA recuerda que Ramirez está suspendido de militancia por lo menos para cuatro años por haber cometido tres faltas graves, y subrayan que la militancia ya tuvo voz en la elección interna en un congreso nacional ordinario. Además, reprochan que Ramirez rehusó participar en los órganos internos.
La tesis de los críticos con Blanco siempre ha sido que ese congreso, que ha sido objeto de resoluciones judiciales a favor de los de Ramirez, nunca tuvo las garantías suficientes para celebrarse y que participar de los órganos hubiese sido otorgar legitimidad política a algo que no la tiene.
