El pasado mes de abril, se celebró la I Jornada 'El futuro del TAV en Navarra', organizada por la Demarcación de Navarra del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, el Colegio de Ingenieros Industriales de Navarra, el Colegio de Ingenieros Agrónomos de Aragón, Navarra y País Vasco, Delegación Navarra y el think tank Institución Futuro.

Seis meses después, las entidades organizadoras han hecho público este martes el resumen de las ponencias presentadas, así como las conclusiones generales del encuentro y las recomendaciones propuestas. En el acto han estado presentes Pedro Busto (decano de la demarcación navarra del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos), Michel Iturralde (miembro del Colegio de Ingenieros Industriales de Navarra), José Miguel del Amo (en representación del Colegio de Ingenieros Agrónomos) y José María Aracama. presidente de Institución Futuro.

Se concluye que es necesario acelerar la construcción del TAV en el tramo navarro para lograr que en diez años se puedan realizar los trayectos de pasajeros Pamplona-Madrid/Barcelona en alta velocidad. Para ello, se reclama al Estado que invierta 2.550 millones de euros en una infraestructura clave para el desarrollo socio-económico de la región, y recuerdan que actualmente "el 77% de la población peninsular española tiene ferrocarril de alta velocidad", y Navarra forma parte "del 23% excluido de esa infraestructura".

Los promotores del documento afirman que "el corredor navarro está incluido en el Corredor Atlántico al ser la salida de Zaragoza a Francia pasando por Pamplona. Este hecho asegura la conexión a esta red internacional", y que la "conexión del Corredor Atlántico con Francia será después del año 2037. Por tanto, aseguran, "ahora no urge discutir sobre si la conexión del tramo navarro se realizará por Ezkio o por Vitoria –una decisión estratégica- sino impulsar que se construya la estación de Pamplona y se logre poner en servicio el Pamplona-Madrid y Pamplona-Barcelona".

Calculan que el TAV "podría llegar a Pamplona desde la línea Madrid-Barcelona en aproximadamente 10 años". Advierten que "para lograr cumplir el citado plazo hay que conseguir una inversión total de 2.555 millones de euros, lo que se corresponde con 260 millones euros/año, es decir un 14% de la inversión total de ADIF durante 10 años".

Los tres colegios de ingenieros y la Institución Futuro recuerdan que a Navarra "solo le ha correspondido en 30 años una inversión de 233 millones de euros (70 millones en 2022), el 4 por mil de todo lo invertido en Alta Velocidad en España. Al actual ritmo de inversión, el corredor navarro de Alta Velocidad, incluyendo la conexión con la “Y” Vasca, no sería una realidad hasta dentro de 60 años".

Por lo que se refiere a la estación de Pamplona, apuntan que su reubicación permitirá culminar "el principal desarrollo urbanístico de la historia de Navarra, con la construcción de 12.000 viviendas de las cuales la mitad tienen algún grado de protección, y es crucial para la llegada del TAV, por lo que urge su desarrollo".

Por todo ello, estas entidades recomiendan "priorizar el TAV en la agenda política, infraestructura indiscutible e indispensable para el desarrollo de Navarra y el desarrollo urbanístico de la Comarca de Pamplona". Demandan "una búsqueda de consensos políticos que abarquen más de una legislatura por la envergadura del proyecto", y de "apoyos y aliados en la sociedad civil navarra y de otras comunidades vecinas (Aragón y CAV) también interesadas en la ejecución del TAV en Pamplona, para "poder exigir al Estado su financiación y construcción en el menor tiempo posible".

Asimismo piden una "redefinición de las prioridades a día de hoy, que pasan por impulsar el tramo desde el sur hasta Pamplona (incluyendo la construcción de la nueva estación de Pamplona)". Por último reclaman que se definan plazos y compromisos públicos "de inversión por parte del Estado para las diferentes fases de ejecución".