madrid - Milos Simovic, preso en Serbia, testificó ayer en el juicio y confesó que Sretko Kalinic, al que llaman el Carnicero y que también cumple condenas en su país, le contó que él mató en 2009 a su compañero de los Tigres de Arkan en Madrid porque tenía una relación íntima con su esposa.
Simovic declaró por videoconferencia desde Belgrado en la cuarta jornada de la vista por esta causa en la que la fiscal acusa a cuatro serbios de dicha banda de matar en 2009 en Madrid a su compatriota Milan Jurisic, al que descuartizaron y cuyos restos arrojaron al río Manzanares. - Efe