La Policía Foral reduce la unidad de escoltas a 50 agentes tras reubicar a 8 el último año
La División de Protección de Autoridades contaba con 88 efectivos en 2012
pamplona - La actual jefatura de la Policía Foral, junto con la Dirección General de Interior del Gobierno de Navarra, siguen reduciendo el número de efectivos de la División de Protección de Autoridades, que en estos se compone de 50 efectivos tras la reubicación de ocho agentes en el último año. Los planes del actual Ejecutivo foral es seguir disminuyendo el número de escoltas, mediante la amortización de las plazas de próximas jubilaciones, dado que las necesidades del servicio así lo permiten.
El escenario político surgido a raíz del cese de la violencia de ETA ya llevó a la anterior la Dirección General de Interior del Gobierno de Navarra a redimensionar la División de Protección de Autoridades de la Policía Foral, que en el año 2012 contaba con 88 agentes. Fue en ese año cuando empezaron a reubicarse agentes de esta unidad en otras áreas del Cuerpo autonómico, como Tráfico, la División de Prevención o la Brigada de Medio Ambiente.
Al comienzo de la presente legislatura, los actuales miembros del Gobierno de Navarra ya anunciaron su intención de desistir el servicio de escolta que proporciona la Policía Foral. De este modo, en estos momentos la División de Protección de Autoridades solo procura vigilancia permanente a la presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos; a la presidenta del Parlamento foral, Ainhoa Aznárez; a los expresidentes Miguel Sanz y Yolanda Barcina; y al actual jefe de la Policía Foral, Torcuato Muñoz.
Las menores necesidades de este servicio ha permitido que ocho miembros de la unidad hayan sido destinados a otras ocupaciones en los últimos meses. En concreto, un subinspector ha sido reubicado en el Parlamento; dos cabos están ahora en el Palacio de Justicia y otro en control de detenidos; y cinco agentes han pasado a trabajar en la División de Prevención o en el Centro de Mando y Coordinación, entre otros destinos. De este modo, actualmente la división ha quedado conformada por 50 agentes (un inspector, dos subinspectores, siete cabos y 40 policías).
diversificación de tareas Además de trabajar como escoltas para las personalidades ya citadas, los agentes de esta unidad realizan servicios de contravigilancia para el resto de miembros del Ejecutivo foral, en especial para el vicepresidente Manu Ayerdi y del consejero de Educación, José Luis Mendoza; para los expresidentes Jaime Ignacio del Burgo y Juan Cruz Alli; así como vigilancias de edificios gubernamentales.
Asimismo, se han encargado de la protección de tres víctimas de violencia sexista de máximo riesgo en Viana, Ansoáin y Alsasua, y han colaborado con otras unidades de la Policía Foral en la persecución de determinados delitos, como trata de mujeres o delitos de índole económica.