PAMPLONA - La Policía Foral detuvo ayer a dos jóvenes de Alsasua de 22 años, cuyas identidades corresponden a las iniciales J.V.G. y A.V.C., en relación con la agresión sufrida de madrugada por dos guardias civiles fuera de servicio y sus parejas en un altercado en el que intervinieron alrededor de 45 personas, según informaron fuentes de la Guardia Civil, que relacionaron lo ocurrido con el movimiento Ospa Mugimendua, que pide el repliegue de las Fuerzas de Seguridad del Estado. Testigos presenciales apuntaron, sin embargo, que la trifulca se pudo iniciar a raíz de una discusión en la que se vio implicada una de las mujeres y negaron que participaran tantas personas en los hechos.

La agresión se produjo en torno a las 4.55 horas en las inmediaciones del bar Koxka de la localidad que celebra las Ferias de Octubre, donde se encontraban tomando una copa los dos guardias civiles fuera de servicio, un teniente de 25 años, procedente de Valencia y destinado en Alsasua desde agosto del año pasado, y un sargento de 35 años, originario de Córdoba y con plaza en la localidad navarra desde hace menos de un mes. Se encontraban acompañados por su pareja y su esposa, respectivamente.

Según fuentes de la Guardia Civil, en la misma taberna se encontraba un numeroso grupo de jóvenes bastante bebidos que habrían empezado a increpar a los dos guardias civiles al reconocerles como miembros del Instituto Armado, por lo que al abandonar estos últimos el local, les siguieron hasta la calle donde les agredieron. Las mismas fuentes vincularon a alguno de los participantes en los hechos con el movimiento Ospa Mugimendua, contrario a la presencia de la Guardia Civil y la Policía Nacional en Navarra y la CAV.

Sin embargo, testigos del altercado indicaron que su origen fue un incidente previo con alguna de las mujeres, que habría sido incomodada por algún comentario de los jóvenes, lo que desencadenó el enfrentamiento. De hecho, según estas fuentes, en el momento que comenzaron a ser golpeados los dos miembros de la Guardia Civil se identificaron verbalmente como tal ante sus agresores.

“Puñetazos y patadas” La pareja del teniente agredido aseguró ayer en Twitter que los participantes en los hechos “eran 40 más o menos. Nos pegaron puñetazos y patadas. Esto no tiene perdón ni justificación”, escribió la joven, que recibió la solidaridad de numerosos usuarios de la citada red social. “Sigo esperando el apoyo de las feministas de la zona por haber recibido puñetazos, patadas y demás por el simple hecho de ser la novia de...”, tuiteó posteriormente en referencia a los hechos.

Como consecuencia de los golpes, el teniente sufrió una factura en el tobillo de la que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente ayer mismo en la Clínica San Miguel, según indicaron fuentes de la Delegación del Gobierno en Navarra, mientras que el sargento y las dos mujeres sufrieron contusiones leves.

Tras tener conocimiento de los hechos, una patrulla de la Comisaría de Alsasua de la Policía Foral se trasladó hasta la calle García Ximenez, y también fueron movilizados miembros de la Brigada Central de Intervención del Cuerpo autonómico, que practicaron la primera de las detenciones sobre las 5.30 horas, a pesar de los forcejeos que se produjeron con motivo del arresto. Mientras tanto, sendas ambulancias trasladaron a los heridos a Pamplona.

La segunda detención tuvo lugar sobre las 6.30 horas en el exterior de la Comisaría de la Policía Foral, en donde se personaron algunos de los jóvenes que presenciaron el anterior arresto y protagonizaron un nuevo altercado, por lo que uno de ellos fue detenido. Tanto a J.V.G. como a A.V.C. pasarán este lunes a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Pamplona investigados por delitos a agente de la autoridad y lesiones, y no se descarta que en los próximos días se lleven a cabo nuevas imputaciones e identificaciones de los implicados.