Pamplona - El letrado José Luis Galán, defensor de Iñaki Abad (10 años de cárcel) y Aratz Urrizola (9 años), afirma que la Guardia Civil se hizo cargo de la instrucción del procedimiento casi con manu militari, con un interés inusitado, y en el caso de Urrizola “impugna toda la relación de hechos probados que se refieren a él, que no tuvo la más mínima intervención en los hechos, ya que estaba ausente en el momento de las agresiones”. Sus dos defendidos “fueron sometidos a ruedas de reconocimiento con personas extranjeras, de distintos rasgos étnicos y raciales, suramericanos, mulatos y árabes. Resultan poco creíbles los reconocimientos efectuados”. En el caso de Aratz, “la razón de la identificación puede estribar en que, efectivamente, la misma hubiera visto a mi representado en el Koxka, siempre antes de las 3, hora en el que el mismo abandonó el local para no volver y, al verlo participar en la concentración, lo relacionase con los hechos, considerándole erróneamente autor de los mismos”. De Abad rebate que no se le identifica en un primer momento ni pese a tenerlo el sargento a su lado, “imputación que solo hizo este y su pareja” una vez ya en los reconocimientos y que Iñaki Abad no pudo participar en la agresión, ya que todos los testigos lo sitúan en el lugar al finalizar el incidente, “no lo habían visto en toda la noche” tras cerrar la caja del bar en el que trabaja. Y tampoco se le puede condenar por de-sórdenes ya que todos los testigos narran su actitud serena sin provocar una alteración grave. - E.C.