El pleno del Parlamento Europeo se ha mostrado este miércoles a favor de la idea de Bruselas de imponer un arancel de 2 euros a las compras que se realizan en plataformas online de bajo coste, como las chinas Shein y Temu, siempre que el pago de este nuevo gravamen sobre las compras de pequeño valor realizadas a proveedores extracomunitarios no sea asumido por el consumidor final y se realice de acuerdo a las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Así consta en el informe aprobado en Estrasburgo (Francia) con 619 votos a favor, 26 en contra y 46 abstenciones, con el que los eurodiputados identifican formas de aliviar la presión sobre las autoridades aduaneras y de vigilancia ante las dificultades que encuentran para controlar y garantizar la seguridad de los aproximadamente 12 millones de pequeños paquetes que llegan a la UE por la compra online.

Derechos de aduana

El texto apunta que la Eurocámara apoya la eliminación de la actual exención de derechos de aduana para productos con un valor inferior a 150 euros, en el marco de la reforma del Código Aduanero de la UE, ya que se estima que alrededor del 65% de los paquetes que entran en la Unión están "deliberadamente infravalorados".

Además, muestran su apoyo en principio a la idea de Bruselas --aún por concretar-- de imponer una tasa de 2 euros por la gestión de cada paquete procedente de fuera de la UE; pero avisan de que tal medida debería producirse sólo si la Comisión puede garantizar la "proporcionalidad" de la tasa que se imponga, que respeta las reglas de la OMC y también que no lo acabarán pagando los consumidores europeos.

Digitalizar el sistema europeo

Otra de las iniciativas que los eurodiputados ven con buenos ojos es almacenar las mercancías en territorio comunitario como solución para mejorar los controles y verificar que los productos son seguros; si bien para lograrlo sería necesario convencer a los operadores extracomunitarios que utilizaran almacenes dentro de la UE para gestionar sus envíos a clientes europeos.

Asimismo, la Eurocámara boga por avanzar en la digitalización del sistema aduanero mediante tecnologías como la inteligencia artificial y la cadena de bloques, que permitirían agilizar los controles y hacerlos más eficaces. Insta, además, a los Estados miembro a destinar más recursos a las autoridades aduaneras nacionales para la implantación de estas herramientas. También pide a la UE que refuerce la aplicación de las normas ya vigentes y garantice que las plataformas cumplan sus obligaciones.