El exdirectivo de Osasuna Txuma Peralta Gracia, que se encontraba en busca y captura desde el pasado 28 de julio, ingresó voluntariamente este jueves en el centro penitenciario de Pamplona. Lo hizo por su cuenta sin que fuera arrestado previamente pese a que figuraba una orden de busca y captura contra él.

La orden de ingreso en prisión fue dictada por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra al haber vencido el plazo dado para ingresar de forma voluntaria en un centro penitenciario.

Según constaba en la resolución judicial dictada entonces, la Audiencia había conocido a traves de su abogado que Peralta se hallaba en Valencia. Debió explicar que quería despedirse de algunos familiares y que quería obtener un informe médico de sus dolencias para que el forense lo examinara en prisión.

La Audiencia procedió a incluir esa orden de búsqueda (requisitoria) en el sistema informático correspondiente y en los ficheros automatizados de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

La Sección Segunda de la Audiencia había notificado el pasado viernes su rechazo a demorar el ingreso en prisión, fijado como fecha límite ese día, a las 12 horas, de los tres condenados que habían solicitado un aplazamiento, el expresidente Miguel Archanco Taberna y los exdirectivos Sancho Bandrés Ardanaz y Jesús Peralta Gracia.  

Tanto Archanco como Bandrés recogieron sus mandamientos de ingreso en prisión y entraron en la cárcel de Nanclares de Oca, en Álava, no así Peralta, quien no compareció.

Respecto a las alegaciones para el aplazamiento solicitado por Peralta, los magistrados señalaban en esa resolución que los motivos médico-asistenciales planteados “desde luego no son indiciariamente suficientes”. De los informes médicos aportados, precisaba la Audiencia, en ningún modo puede estimarse que el penado se halle “aquejado de una enfermedad muy grave con padecimientos incurables”.