La empresa Fontanería sin obras (FSO) ha logrado cambiar la forma en que se solucionan los problemas de fugas y desatascos en las tuberías y bajantes de las viviendas de las comunidades de vecinos. Con más de 20 años de experiencia en el sector, FSO se ha especializado en realizar todo tipo de intervenciones sin la necesidad de recurrir a tareas engorrosas y complejas como picar paredes, suelos, etc.

Según Rubén Fernández, gerente de la empresa, al rehabilitar las instalaciones no es necesario romper las paredes o suelos. FSO logra rehabilitar los tubos dañados, con fugas o corrosión desde puntos determinados en la instalación, lo que permite recuperar la instalación existente. “En algunos casos puntuales puede ser necesaria alguna intervención tradicional en algún segmento de tubería, pero en general se utiliza la tubería antigua de molde y se realiza una tubería interior con resina epoxi sin necesidad de picar nada”, explica el gerente.

Inicialmente la empresa se centraba en la rehabilitación de tuberías de agua sanitaria y calefacción, pero con el paso de los años han incorporado procesos y maquinaria parar rehabilitar bajantes o los llamados desagües de baños, cocinas y pluviales en viviendas sin picar.

Además, también ofrecen servicios de limpieza para desatascos tanto en edificios comunitarios como en viviendas particulares, así como trabajos de fontanería tradicional.

Sistema innovador

La novedosa técnica empleada por Fontanería sin obras (FSO) consiste en generar una corriente de aire en la instalación inyectando aire comprimido y una especie de arena (mineral corindón) para recuperar las tuberías cegadas.

Posteriormente, se inyectan resinas homologadas que forman un recubrimiento o tubo interior. Para los desagües y bajantes se utiliza un robot guiado con videocámara para rehabilitar la canalización.

Los beneficios de esta técnica son notables, ya que gracias a los materiales homologados para saneamiento se logra dejar las instalaciones en óptimas condiciones de funcionamiento en cuanto a salubridad e hidráulica, alargando su vida útil.

Los materiales cuentan con un informe oficial de testeo que indica una duración de entre 40 a 60 años, lo que supone ahorrarse quebraderos de cabeza a medio y largo plazo y dinero, puesto que evita otros problemas que puedan ser costosos.

Resultados óptimos

“Los vecinos o empresas y profesionales han respondido de manera positiva a los servicios de FSO, agradeciendo que se realice una rehabilitación de envergadura sin incordiarlos”, afirma el gerente, Rubén Fernández.

La empresa diseña un plan de trabajo personalizado que, según el tamaño de la instalación, requiere tener acceso a la vivienda solo un día o día y medio tanto en tuberías como desagües.