En el cambiante panorama inmobiliario español, los denominados "minipisos" están captando cada vez más la atención de los buscadores de vivienda. Según un estudio de Idealista basado en los anuncios de los últimos tres meses, el 0,3% de todas las viviendas navarras anunciadas para alquilar tienen una superficie inferior a los 30 metros cuadrados.

En Navarra, más del 65% de los pisos en alquiler tienen menos de 100 metros cuadrados, cifra que se sitúa ligeramente por debajo de la media nacional. Sin embargo, este porcentaje es considerablemente menor en comparación con el País Vasco, donde más del 76% de las viviendas en alquiler tienen menos de esa superficie. En Madrid y Extremadura, alrededor del 30% de las viviendas en alquiler no superan los 60 metros cuadrados. En Pamplona, estos minipisos representan el 64,1% del mercado.

A pesar de esta tendencia hacia viviendas más compactas, Navarra se posiciona en el top 5 de Comunidades Autónomas con un mayor número de viviendas en alquiler con más de 100 metros cuadrados, alcanzando un 34,2% del total. Solo es superada por la Comunidad Valenciana (36%), Murcia (40%) y Baleares (44%). La media nacional para este tipo de viviendas se sitúa en el 30,2%, mientras que Pamplona destaca con casi 6 puntos porcentuales por encima de esta media.

Este fenómeno refleja la diversidad del mercado inmobiliario navarro, que ofrece opciones tanto para aquellos que buscan viviendas compactas y funcionales como para aquellos que prefieren espacios más amplios y confortables. A medida que evoluciona el sector, Navarra se consolida como un destino atractivo para la inversión inmobiliaria, ofreciendo una amplia variedad de opciones que se adaptan a las necesidades y preferencias de los distintos perfiles de compradores y arrendatarios.