El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Navarra ha otorgado la calificación de "Muy buena" a la añada de 2019, una cosecha con la que se han elaborado 39 millones y medio de litros de vino, el 56 % tintos, el 31 % rosados y el 13 % blancos.

La calificación se ha otorgado tras analizar el informe de valoración elaborado por la sección de Viticultura y Enología (EVENA) del Gobierno foral.

El estudio examina las características desde el punto de vista de la viticultura y de la enología para otorgar un diagnóstico a los vinos blancos, rosados y tintos, ha explicado en una nota el Consejo Regulador de la DO Navarra, que advierte de que las características climatológicas del año definen en la viña los vinos resultantes.

En este caso de los caldos de 2019, la viña brotó en la primavera con un adelanto de alrededor de diez días respecto al año anterior, aunque dentro de la media de la Denominación de Origen.

Un mes de mayo muy frío y húmedo y un inicio de junio con temperaturas bajas ralentizaron el desarrollo de las bayas, situación que se mantuvo hasta que el verano comenzó con récords en los registros más altos de los termómetros.

El período estival continuó el pasado año cálido y tuvo dos consecuencias: que el desarrollo vegetativo se fuera adelantando y que las primeras previsiones sobre las cantidades productivas empezaran a disminuir.

La vendimia comenzó en la región vitivinícola, como siempre en las localidades más meridionales, a finales de agosto en circunstancias muy favorables para la uva, aunque se manifestó la merma que se predijo con rendimientos más bajos de los estimados en todas las variedades.

La DO Navarra explica que el estado sanitario de la cosecha en el momento de la vendimia era excelente y los granos de uva mostraban una acidez total media alta y parámetros de color elevados.

La recogida terminó a finales de octubre, protagonizada por el descenso en la producción respecto a la media de las campañas de la región.

La cosecha de 2019 se compone de un 86 % de variedades tintas (Tempranillo, Garnacha, Merlot, Cabernet Sauvignon, Graciano, Mazuelo, Pinot Noir y Syrah) y el resto, blancas (Chardonnay, Viura, Moscatel de Grano Menudo, Garnacha Blanca, Sauvignon Blanc y Malvasía).

Desde el punto de vista enológico, el informe detalla las características de los vinos tintos, que presentan una graduación alcohólica media-alta con una acidez óptima y colores intensos, mientras que la estructura es superior a la de la añada anterior.

En el caso de los vinos blancos y rosados, el perfil aromático es bueno y también cuentan con unos parámetros de color y estructura mayores.

En total, se han elaborado 39 millones y medio de litros de vino de la cosecha 2019, de los que el 56 % son tintos, el 31 % son rosados y el 13 %, blancos.