Ruthie Shusther es una mujer viuda que cumplió ayer 100 años y que lleva nada más y nada menos que 50 años trabajando en un McDonald’s de Pittsburgh, EEUU y no tiene pensado jubilarse mientras pueda seguir haciéndolo. Antes de la pandemia Ruthie solía salir a bailar, al menos, cuatro veces por semana. Le encanta recibir a sus clientes con una sonrisa y, además, los viernes por la tarde deleita a los comensales con una canción. “Los viernes vienen unos 30, y todos cantamos You are my Sunshine. Todos la cantamos, todo el mundo viene”, dijo al programa Good Morning America.

Para Ruthie la edad es solo un número y no da ninguna importancia a ser centenaria. Dijo que mientras pueda seguirá trabajando y explicó, además, que se quedó viuda a los 50 años y desde entonces no ha dejado de trabajar. “Me gusta trabajar. Me pagan. Pago mis facturas, y eso es bueno. Nunca he tenido mucho dinero, pero siempre he tenido suficiente. Así son las cosas”, afirmó la anciana. Tras las cinco décadas que lleva trabajando en el mismo lugar, Shuster se ha hecho popular en su localidad e incluso han tenido que instalar un buzón en el McDonald’s en el que trabaja para que los clientes puedan dejarle tarjetas de felicitación.